El fiscal elevó ayer la petición de penas para cuatro de los ocho acusados de secuestrar al maderero de Cambre durante seis días apr aconseguir un rescate, hasta que fue liberado en un galpón de Lalin por la Guardia Civil en 2014. Las defensas de siete de ellos alegaron que sus defendidos actuaron con "miedo" al cabecilla de la trama, Jesús Mejuto, solicitando la absolución o penas en grado mínimo.

El Ministerio Público , que inicialmente pedía 10 años de prisión para cada uno de los ocho acusadosy otros tres para el portador de un arma de fuego añadió otra pena de tenencia ilícita de armas para cuatro acusados más, pues piensa que había varias pistolas y revólveres a si disposición de ellos, lo que eleva a 13 años la condena que solicita.

Asimismo, abre la posibilidad de que se expulse del territorio nacional al procesado más joven, de 20 años, si no cumple la pena de manera íntegra, pues tiene nacionalidad mexicana. La acusación particular se ha adherido a estas peticiones entre las que se incluye la prohibición de comunicarse y aproximarse a la víctima a quinientos metros durante diez años más que la duración de la condena.

El letrado que defiende al supuesto cabecilla de la trama pidió la libre absolución para el primero por la eximente de un trastorno psicológico, aunque contempla la opción de que lo condenen a tres años por varias atenuantes, mientras que solicita un año y seis meses para su hijo, al que aplica también atenuantes.

En su informe final, la Fiscalía incidió en la existencia de agravantes por haber actuado en un lugar despoblado y por abuso de superioridad, pues fueron cinco personas con pistolas contra una. Sobre el más joven ha asegurado que llegó a España para "delinquir, conseguir dinero y volver a su país", por lo que espera que su condena sea ejemplar.