Los vecinos aseguran que se trataba de un matrimonio "poco sociable" y que nunca escucharon disputas entre ellos. Marina, la mujer asesinada en su vivienda de Mos, era una mujer "muy trabajadora", "muy esclava" según aseguran. Se encargaba de coger agua del pozo para lavar la ropa a mano. "Tenía las manos llenas de sabañones por el agua fría" explica una vecina, porque cuando se les estropeó la lavadora nunca más la repusieron. La vivienda carecía de cuarto de baño, tan solo contaba con un váter.

"Era una mujer que siempre iba muy limpia, muy aseada, aunque tenía que calentar agua y lavarse en una tina" relata una vecina. Asimismo, en la casa carecen de frigorífico, solo cuentan con un arcón congelador. El matrimonio nunca cerraba la puerta de entrada de la casa, ni de noche ni de día. De ese modo sus tres perros entraban y salían cuando querían. Según los vecinos, el detenido protesta a diario por los conductores que aparcan sus vehículos delante de su casa, aunque carece de vado.