En la sesión de ayer declararon también los vigueses Nelson Beltrán Cejuela y Luis Miguel Iglesias Vila que, aunque admitieron su colaboración con los dueños del velero Pixapo para conseguir un barco que le sustituyera tras la avería qeu sufrió al ir en busca del alijo del Ripitide, negaron tener conocimiento de que se trataba de un asunto de drogas.

Nelsón Beltrán confesó ser intermediario de los procesados José Manuel Rodríguez Camesella y Jesús Iglesias Cumplido con un ciudadano portugués para buscar el barco relevo y que era quien reenviaba los mensajes del portugués a los dueños del Pixapo y de éstos al portugués. Aunque ante la juez de Instrucción admitió que sabía que era para un transporte de droga, ayer ante el tribunal aseguró que no lo recordaba pero que nadie se lo había dicho. Una contradicción que resaltó el fiscal a quien respondió que con anterioridad ya había sido condenado a 10 años por tráfico de drogas. Luis Miguel Iglesias, también con una condena anterior, aseguró que le contrataron para unas reparaciones, en concreto una lavadora, en un barco que al parecer estaba "perdido" y "averiado". Negó que le hubieran comunicado que iba a recoger droga, si bien aseguró que le pareció raro que no pudieran ponerse en contacto tras varios días averiado. Hoy continúan las declaraciones de los presuntos cabecillas.