La lucha contra el narcotráfico sigue siendo una prioridad en la provincia de Pontevedra. Los juzgados de Vigo y del resto de este territorio registraron el pasado año más de 270 asuntos de esta materia, una cifra que si bien es inferior a la de anteriores ejercicios, evidencia que la problemática continúa muy presente. El balance sobre esta actividad delictiva que se incluye en la última memoria de la Fiscalía Provincial de Pontevedra apunta a que una de las claves de esta activa pervivencia es el "enraizamiento" del tráfico de drogas en esta zona, "favorecido, sin duda alguna, por las condiciones naturales de las costas de Pontevedra y por la vocación marinera de su población". El informe elaborado por el fiscal antidroga Luis María Uriarte también se refiere a los procesos que se realizan para destruir los estupefacientes incautados: a lo largo de 2014 los jueces autorizaron la quema de casi 2.000 kilos de droga en la central térmica de As Pontes (A Coruña) y en la Empresa Nacional de Celulosas (Ence) de Pontevedra.
Los 271 casos de tráfico de drogas registrados por los juzgados de la provincia el pasado ejercicio suponen un 16% menos de los que hubo en 2013, pero están por encima de los incoados en años como el 2010. Prácticamente hay un equilibrio entre las causas relativas a "drogas duras" -cocaína y heroína- y las "drogas blandas" -hachís y marihuana-: hubo 145 de las primeras y 136 de las segundas. Una tendencia que se mantiene, aunque no de forma tan contundente, en los 123 escritos de acusación que formuló el Ministerio Fiscal en el período analizado. "Esta circunstancia, aunque parecería apuntar a un mayor consumo de las llamadas 'drogas duras', debe más bien ser interpretada como un predominio del tráfico de este tipo de sustancias, fundamentalmente cocaína, en el ámbito territorial de esta Fiscalía, frente al hachís y otras 'drogas blandas' que utilizan otras vías principales de entrada en nuestro país", argumenta Uriarte, que señala que mientras la provincia de Pontevedra es una vía de entrada de la cocaína para después ser distribuida en otras regiones, en el caso del hachís esta zona sería "un receptor más de las partidas introducidas en España a través de otros lugares".
Otro dato que se destaca en la memoria es que el pasado año se dictaron 129 sentencias sobre este tipo de delitos, dándose la circunstancia de que 120 de ellas -el 93%- fueron condenatorias. Este porcentaje supera el obtenido en los últimos años -en 2010, por ejemplo, las condenas se quedaron en un 77% del total-.
Geografía
La distribución geográfica de los casos judiciales abiertos el pasado año dibuja las zonas más calientes en la provincia en lo que a narcotráfico se refiere. Vigo, con casi un centenar de asuntos, asumió el 37% del total. Esta ciudad y la de Pontevedra, que tramitó otros 86, son las que suman más causas de esta naturaleza. Además del criterio poblacional, el fiscal especializado hace especial hincapié en el caso de Vigo en "la existencia del puerto y el aeropuerto como importante cauce de entrada de personas y mercancías y, por la misma razón, como cauce de entrada de algunas partidas de droga".
Un segundo grupo de poblaciones con una importante incidencia del narcotráfico son Vilagarcía y Cambados, cuyos juzgados registraron en 2014 un total de 17 asuntos en cada uno de los casos. Son, se señala, las comarcas que cuentan "con una mayor tradición, a lo largo ya de muchos años, en la perpetración de esta clase de actividades delictivas". Uriarte también hace especial mención a Tui, donde se incoaron 19 procedimientos, "ya que por su condición fronteriza con Portugal se constituye en paso obligado para el tránsito de drogas existente entre ambos países". En el resto de municipios pontevedreses, concluye, la incidencia del narcotráfico se produce ya de manera mucho más puntual.
Una medida que se concreta de forma pormenorizada en el informe es el de la destrucción de drogas, labor para la que se emitieron instrucciones por parte de la Fiscalía General del Estado. En lo que se refiere a 2014, hubo 8 actuaciones de quema de estupefacientes incautados en la provincia de Pontevedra y en la de Ourense, cuatro de ellas en As Pontes y las restantes en Ence: en la central coruñesa se quemaron 1.554 kilos fundamentalmente de cocaína y heroína, mientras que en las instalaciones pontevedresas se destruyeron otros 376 kilos de droga, sobre todo "plantas de marihuana y derivados del cannabis". Al cierre del pasado año, sólo quedaban por destruir seis alijos, todos incautados en ese ejercicio excepto uno de 2013.
La memoria del Ministerio Público, que destaca el alto "nivel de preparación" y la "profesionalidad" de Policía Nacional, Guardia Civil y SVA en la lucha contra el narcotráfico, concreta los casos más importantes, analizando los escritos de acusación presentados y los juicios celebrados. También se refiere a las organizaciones desarticuladas, que en 2014 fueron cinco: tres operaciones dirigidas por juzgados de Vigo y otras dos a cargo de salas de Pontevedra y Cangas.Dos fueron por tráfico de cocaína, otros dos de hachís y una de heroína.
