Dos años después de la aparición en una cuneta próxima a Santiago del cuerpo sin vida de Asunta Basterra, la gente sigue llevando velas y flores al lugar para recordar a la pequeña.

El cuerpo sin vida de Asunta, de origen chino, se localizó en la madrugada del día 22 de septiembre de 2013 en la cuneta de una pista forestal de Teo (A Coruña), a poca distancia de una casa propiedad de Rosario Porto, madre de la pequeña, donde presuntamente se habría cometido el crimen que será juzgado a partir de la próxima semana en la capital gallega.

Rosario Porto y Alfonso Basterra, padres adoptivos de la menor y que están en la cárcel desde pocos días después de la aparición del cadáver, se enfrentan a penas de hasta 20 años de prisión.

Están acusados de idear un plan de común acuerdo para dar muerte a su hija suministrándole ansiolíticos para posteriormente asfixiarla con una almohada.

A diferencia del año anterior, primer aniversario de la muerte, en esta ocasión no se han publicado esquelas en la prensa local por parte de ninguno de los progenitores.

Este aniversario, en cambio, está marcado por el inminente comienzo del juicio, que rodeado de una alta exposición mediática, comenzará el próximo martes, día 29, y tendrá una duración de 4 semanas. Está previsto que declaren 84 testigos y 60 peritos. Los días principales de esta vista oral serán el día 1 y 2 de octubre para los que están marcadas las declaraciones de Rosario Porto y Alfonso Basterra.

La celebración de este juicio ya sufrió un aplazamiento, puesto que debía celebrarse el pasado mes de junio, lo que resulto imposible por motivado por las numerosas renuncias a ejercer de jurado popular, que será la fórmula en la que se juzgue este crimen.