La muerte de un senegalés en Salou, que se precipitó por el balcón de su casa cuando huía de los Mossos que lo perseguían en una redada contra el top manta, provocó ayer disturbios en el municipio catalán. El hombre, de 50 años, falleció poco después de las seis de la mañana lo que provocó la concentración de más de 150 personas en la zona, que arrojaron piedras, sillas y mesas de las terrazas de la plaza contra los agentes antidisturbios que vigilaban el lugar. La operación se saldó con 12 detenidos, uno ya en libertad.