El dispositivo de búsqueda desplegado este sábado ha encontrado el cuerpo sin vida del niño de 16 años desaparecido este viernes en Goián (Tomiño) en aguas del Miño cuando trataba de alcanzar la orilla de la playa de la Atalaya situada bajo el puente internacional entre dicha localidad y Vila Nova de Cerveira (Portugal).
Ha sido el equipo de buceo del parque de bomberos de la localidad lusa de Caminha quien ha hallado el cadáver a unos 150 metros del puente y a unos cuatro metros de profundidad. Los buzos portugueses trabajaban junto al Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil en el operativo desplegado.
El juez procedió al levantamiento del cadáver tras aparecer a unos cuatro metros de profundidad del río Miño en torno a las 13.00 horas. El hallazgo ha llegado después de que esta mañana se reanudara la búsqueda con un nuevo dispositivo a primera hora.
Trágica desaparición
El niño intentó cruzar el río junto a un amigo con el infortunio de que quedó atrapado por unos remolinos de agua que hizo inútiles sus intentos de avanzar. Un vecino que estaba en una barca pudo llegar a tiempo y sacar del agua al otro chico, pero el pequeño se hundió.
La suceso saltaba sobre las 16.30 horas del viernes. El 112 daba la alerta a los servicios de emergencias, poniéndose en marcha un amplio dispositivo internacional que finalizaba sobre las diez de la noche. Envuelto en una manta, el amigo del desaparecido esperaba en la playa de la Atalaya con la mirada perdida hacia el río, junto a las mochilas donde llevaban su ropa. Zodiacs y barcas iban y venían de un lado a otro, rondando la zona donde se supone pudo sumergirse el menor. A su lado llegó otro joven y sobre las 19.00 horas apareció en el lugar la hermana de ambos, sujeta por familiares y vecinos, mostrando su desesperación con llanto. La madre apareció poco después, también acompañada por personas que trataban de darles apoyo en los duros momentos que estaban viviendo.
Médicos las atendieron y también prestaron apoyo a otros familiares que estaban muy afectados por el tremendo drama.
Una vecina explicaba desde el puente, asomada a la barandilla, que los chicos llegaron hasta la playa de la Atalaya de Goián acompañados por tres amigos. "Parece que querían cruzar el río hasta la orilla portuguesa, pero un remolino se lo impidió. Uno de ellos logró salvarse, pero el otro perdió todas las fuerzas y se hundió en el río", contó con tristeza.
Amplio operativo
En la playa pudo verse a la alcaldesa de Tomiño, Sandra González, siguiendo el desarrollo del amplio operativo. En la tarde de ayer participaron en las labores de búsqueda los helicópteros del 061 y el Pesca I, que llegó después.
Intervinieron los Bombeiros del Baixo Miño, efectivos de la Comandancia Naval del Miño y de la Marina portuguesa, Policía Local de Tomiño, Protección Civil de Tomiño, Guardia Civil, bomberos de las localidades portuguesas de Vila Nova de Cerveira y Viana do Castelo y un equipo de buceo del parque de bomberos de Caminha.
Hubo un momento en que a los efectivos de las zodiac les pareció que emergía un cuerpo entre las aguas, en dirección a Tui, pero el avistamiento no tuvo resultado alguno. El grupo de Emergencias Supramunicipales de A Guarda se desplazó con su camión bomba y sus dos efectivos realizaron un rastreo por la orilla hasta Eiras.
