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Catástrofe en el Himalaya

Un matrimonio vigués, testigo del devastador terremoto en Nepal: "Estamos vivos de milagro"

Más de un millar de personas perdieron la vida tras el seísmo de 7,8 grados en la escala Richter, que se cebó especialmente con Katmandú -La pareja gallega está celebrando sus bodas de plata: "Fue aterrador, horrible"

Javier Picón (d), junto al guía tras la catástrofe. // FdV

La desgracia sacudió ayer el corazón de Nepal con un devastador terremoto -también se sintió en China e India, donde murieron 13 y 34 personas, respectivamente- de 7,8 grados en la escala Richter que se llevó por delante la vida de más de un millar de personas, unas cifras que, según fuentes del Gobierno nepalí, seguirán subiendo dada la dificultad de las labores de rescate e identificación. El suceso, de momento, no ha dejado víctimas españolas, pero sí varios testigos directos de lo ocurrido que, o bien residen en el país asiático -73 personas están contabilizadas- o están de vacaciones en la zona -hay 70 en los registros-.

Entre los turistas de nacionalidad española se encontraban en Katmandú, la capital de Nepal y la zona que más se vio afectada por el seísmo, un matrimonio de Vigo residente en Chapela que comprobó in situ el horror y la desolación que arrasó a esta ciudad de algo más de un millón de habitantes, que quedó envuelta en el caos. Javier Picón y Estrella Lorenzo, de 48 y 45 años, se encontraban disfrutando en Nepal de un viaje por sus "bodas de plata" que se tornó en pesadilla pero que, afortunadamente, no les dejó ningún tipo de secuela física a ninguno de los dos.

"Estamos vivos de milagro". Con esa frase inicia Estrella Lorenzo la conversación con este periódico desde el jardín del hotel donde se estaban hospedando en Katmandú, que también se vio afectado por el terremoto. Allí pudieron regresar tras abandonarlo por la mañana para disfrutar de otra jornada turística que, en esta ocasión, les llevaba con su guía hasta el Swayambhunath, conocido popularmente como el "templo de los monos", un antiguo complejo religioso situado en lo alto de una colina al oeste de la ciudad de Katmandú, donde no podían imaginar lo que estaba a punto de suceder.

"Estábamos muy altos y de repente se empezó a mover todo, hubo un viento huracanado y empezaron a caer todos los edificios a nuestro alrededor. Todo se llenó de polvo, se escuchaban llantos, desesperación", desvela Estrella, que cuenta como junto a su marido y el guía permanecieron de pie sin apenas moverse, confiando en que nada sucediese. Y así fue, tras algo más de un minuto, el terremoto redujo su intensidad, pero a su alrededor reinaba el caos: "Estaba todo desplomado, fue aterrador, había sangre, personas atrapadas bajo los escombros, hemos visto de todo y nos parece imposible que estemos sanos sin ningún rasguño. Hasta los monos se volvieron locos".

Las réplicas del seísmo se repetían constantemente durante las horas siguientes al terremoto, ya sin la intensidad de la sacudida de tierra original, pero generando también una sensación de total inseguridad y miedo, que crecía por el hecho de tener que descender de la colina hacia el centro de Katmandú, "una bajada horrible"-relata Estrella- al estar las zonas de las escaleras obstruidas por los escombros de las decenas de casas y templos budistas destrozadas.

"Los medios de transporte estaban inutilizados y tuvimos que caminar durante seis horas hasta regresar al hotel", explica la viguesa, que cuenta como durante el recorrido, veían "todo deshecho". Y es que en la capital nepalí se pueden ver edificios completamente derrumbados, incluidos templos y monumentos, zonas especialmente concurridas por turistas como Javier y Estrella, que palpaban la desolación de los habitantes de Katmandú que, en muchos casos, se han quedado sin nada.

"Hemos llorado mucho, la gente nos paraba diciendo que no tenían nada", afirma la viguesa.

El Ministerio de Asuntos Exteriores manifestó sus recomendaciones de viaje tras el seísmo. En su aviso, el departamento que encabeza José Manuel García-Margallo se dirige tanto a los españoles que están ya en Nepal como a quienes tienen previsto viajar próximamente.

"Se recomienda a los viajeros que tengan previsto viajar a Nepal que retrasen sus planes de viaje hasta que se restablezca la normalidad", aconseja Exteriores. Para quienes se encuentren ya en Nepal, pide que extremen las "medidas de autoprotección", que sigan las indicaciones de las autoridades locales y que, "en la medida de lo posible", se pongan en contacto con sus familias para confirmarles que están a salvo, algo que los vigueses pudieron hacer en cuanto regresaron a su hotel vía WhatsApp. "Teníamos muchísimas llamadas y mensajes, por suerte no hubo que lamentar nada malo", concluye Estrella, que agradece también la preocupación de la agencia con la que contrataron el viaje para celebrar unas "bodas de plata" que quedarán, por suerte, grabadas en su memoria para siempre.

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