El abogado Roberto José Álvarez renuncia a iniciar acciones legales contra cuatro de los hijos del rey de los gitanos, Olegario Giménez, imputados por la agresión perpetrada contra el letrado a su salida de los juzgados de Tui a últimos del pasado mes de abril.

Roberto José Álvarez fue agredido al abalanzarse sobre él familiares y miembros de la sociedad gitana después de quedar en libertad con cargos el guardia civil a quien el letrado representaba y un agente forestal, ambos imputados por amenazas graves al rey de los gitanos en su propia casa.

El abogado que fue víctima de la agresión únicamente precisó tras su declaración judicial que "declaré lo mismo que hice ente la Fiscalía de Menores. Me agredieron".

Por su parte, los abogados Marcos García Montes y Víctor Bouzas, que representan a los hijos de Olegario Giménez, informaron que el abogado herido contó en su declaración que "una persona me dio una patada, perdí el conocimiento, me dieron otra patada y volví a desmayarme. Al despertar me encontré sentado en un portal".

Los representantes de los hermanos Giménez informaron que la Guardia Civil presentó ante la víctima una fotocomposición con el fin de que pudiese indentificar al autor o autores de la agresión, pero Roberto José Álvarez no los reconoció.