Una mujer fallecida y más de 30 heridos atendidos en centros sanitarios es el balance del grave accidente registrado ayer en la autovía A-8, a la altura de Abadín (Lugo), debido a una sucesión de choques múltiples en los que se vieron implicados en torno a medio centenar de vehículos: 35 de ellos acabaron con daños. La intensa niebla que provocaba que la visibilidad fuese prácticamente nula fue la causante del siniestro, en el que había al menos tres camiones de gran tonelaje implicados y en el que no fueron pocos los turismos que acabaron convertidos en amasijos de hierro y cuyos ocupantes se salvaron gracias a que pudieron salir a tiempo de su interior. Caos, nerviosismo, gritos por la sucesión de choques... Fue el escenario que se encontró el amplio dispositivo de emergencias, cuyos integrantes coincidían en valorar que las consecuencias de lo ocurrido ayer pudieron ser mucho más dramáticas. La única fallecida es una enfermera de la ambulancia medicalizada del 061 de Foz que iba hacia su casa tras concluir su turno y que, según testigos, fue arrollada cuando se dirigía a auxiliar a los lesionados. Era natural de A Valenzá, en Barbadás (Ourense).

El accidente, según fuentes de la Xunta, ocurrió a las 12.19 horas en el kilómetro 549 de la A-8, en dirección Ribadeo. Tras una primera colisión múltiple, vinieron otras. Todo por la espesa niebla. Y en el carril contrario, se produjeron asimismo choques. "También por la niebla y quizás porque se quedaron observando los primeros siniestros; al menos hubo uno en el que un coche impactó con una autocaravana", describía un bombero. De hecho, según la Guardia Civil de Tráfico de Lugo, ambos sentidos de la A-8 permanecieron cortados -el tráfico se desvió por la N-634- y así seguirán hasta hoy, hasta que concluyan los trabajos en la vía, entre ellos de limpieza y de reposición de los quitamiedos afectados.

A raíz del siniestro fueron movilizados dos helicópteros del 061 -que no pudieron intervenir por la niebla-, así como ambulancias, Guardia Civil y bomberos de Vilalba, Lugo Eume y Barreiros, así como el GES de Cervo. También acudió personal sanitario de varios centros de salud de los concellos más cercanos.

El 061 estableció un dispositivo de asistencia in situ. Los heridos fueron trasladados al PAC de Mondoñedo y también a los hospitales de Lugo y de Burela, así como al centro de salud de esta última localidad. Ayer las cifras totales de lesionados eran confusas. Fuentes de la Guardia Civil de Tráfico de Lugo hablaban de 31 heridos: 29 leves, uno grave y otro muy grave que permanecía en la UCI. Otras fuentes elevan esta cifra en torno a los 40, lo que podría corresponder a lesionados de escasa consideración que fueron atendidos en la zona sin necesidad de ser derivados a centros sanitarios. Un bombero del parque de Barreiros que participó en el operativo señaló que no fue preciso excarcelar a ninguna persona de sus vehículos. "Había coches aplastados debajo de los camiones y se sospechaba que pudiese haber víctimas en su interior, pero no había nadie; los ocupantes habían podido salir a tiempo", explicó.