Docenas de amigos y compañeros de trabajo de Alberto Yrago Muíño, el guardia civil fallecido el viernes en un accidente de moto en Ribadumia, acudieron ayer al tanatorio de Poio para dar el pésame a la familia del agente, que deja viuda y dos hijos menores. Los restos mortales de Yrago llegaron al tanatorio a mediodía, y a las 17,30 horas de hoy serán conducidos a la iglesia de San Xoán de Poio, pues era oriundo de esta parroquia.

Yrago, que residía con la mujer y los niños en la casa cuartel de Cambados, conducía sobre las 23,25 horas del viernes una motocicleta marca Honda por la vía rápida Ribadumia-Cambados cuando embistió por detrás a un Citroën Xsara. Yrago estaba disfrutando de un día libre, y poco antes de medianoche estaba a unos 200 metros de llegar a la rotonda de Os Castaños, cuando impactó con el coche, que conducía un joven de Sanxenxo y en el que viajaba una segunda persona.

El fallecido había formado parte del club motero Os Trasnos, de Ribadumia. También era jugador de fútbol sala.