Los profesionales de emergencias del 061 estuvieron ayer durante más de media hora tratando de reanimar, in situ, a un hombre de 52 años de edad que entró en parada cardiorrespiratoria por un atragantamiento mientras comía un bocadillo en la zona termal de Outariz. El turista, integrante de un grupo de excursionistas según señalaron algunas fuentes, llegó a ser reanimado y fue trasladado en UVI móvil al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Poco después de su llegada al centro sanitario se certificaba su fallecimiento, tal y como manifestaron dos fuentes del hospital.

El suceso provocó un gran revuelo en la zona termal de uso público de Outariz, que estaba llena de bañistas, ante el despliegue de medios de urgencia que intentaron salvaguardar la vida del afectado. En un primer momento, los propios usuarios acudieron a auxiliar al varón, con la participación activa de una joven que no cesó de practicarle técnicas de reanimación.

El personal médico que llegó al lugar se puso en contacto, a las 13,40 horas de ayer, con la central de emergencias del 112 para informar de que el hombre había entrado en parado después de haberse atragantado con comida. El 112 también dio a aviso a la Policía Nacional y a la Policía Local, que enviaron a patrullas.

Además, se movilizó al helicóptero medicalizado del 112 con base en Ourense, aunque el hombre no fue trasladado en el aparato. Una ambulancia lo trasladó hasta el CHUO, pero no se pudo hacer nada por su vida.