En ocho meses, el magistrado de Instrucción Número Uno de Ourense, Leonardo Álvarez, ha cerrado la fase de investigación del cruento crimen de Tomás Milia Méndez, un farmacéutico jubilado de 72 años que el pasado octubre murió al ser presuntamente acuchillado por el joven con el que había concertado relaciones sexuales a cambio de dinero. El magistrado procesa a Alexandru Marius Luca, un prostituto rumano y 19 años que ofrecía sus servicios en internet, por los supuestos delitos de homicidio o asesinato, robo con violencia, incendio y atentado. Las condenas a las que se enfrentará en el próximo juicio -varían en función del grado- podrían superar los 40 años de cárcel. Jueces de la Audiencia Provincial resolverán el asesinato.