Casi tres días de nervios para los familiares fue lo que duró su escapada. Los cuatro jóvenes que permanecían desaparecidos desde el domingo a media tarde en Vigo fueron localizados ayer en un monte de Moaña, donde se refugiaron durante tres noches con una pequeña tienda de campaña y una estructura de plástico. Están en perfecto estado de salud y todo apunta a que su desaparición fue una fuga voluntaria, por lo que en principio no derivará en responsabilidades penales. Fueron localizados a las 12.30 horas, en una zona del Monte de A Gándara, cerca de Sanchilán. Habrían planificado la marcha el propio domingo.

El inspector jefe de la Policía Local de Moaña, Lois Casás, explicaba ayer que habían recibido a comienzos de semana el aviso del SAF (Servicio de Atención a la Familia) de la Policía Nacional de Vigo, grupo que lleva la investigación, explicando que había indicios para sospechar que los chicos, tres de ellos menores, estaban en Moaña. Ayer por la mañana ya recibieron instrucciones claras de búsqueda. Los agentes municipales llegaron a ese lugar de A Gándara después de localizar el terreno de unos familiares del único mayor de edad del grupo, Javier Piloto, vecino de Vigo de 21 años. También habían recibido avisos de vecinos alertando que había jóvenes acampados, pues su "refugio" estaba cerca de varias casas, en el Camiño da Gándara.

Cuando llegaron los agentes, los chicos cubrían con plásticos la tienda de campaña. "Les preguntaron por su identidad y al principio dijeron que eran vecinos de Moaña y que no tenían documentación. Pero los reconocimos por las fotos difundidas y no negaron los hechos", explica Casás. Fueron trasladados a la jefatura moañesa, en donde se les tomó declaración. Y se avisó a las familias. "No quisieron hablar mucho de los motivos de la fuga", dicen fuentes policiales. Parece que la causa es que la pareja más joven quería continuar con su relación, algo que la familia no veía con buenos ojos, aunque según los parientes no se había producido ninguna discusión antes de la desaparición.

El primer familiar en llegar a las dependencias policiales, a las 13.25 horas, fue el padre de Yasmina V., de 17 años. Ya estaba en Moaña buscando a su hija por su cuenta. Cuando accedió a la zona en la que se les tomaba declaración la escena fue de lloros. Los reencuentros con sus familias fueron emotivos en el caso de los tres menores. Yasmina fue la primera en salir del Concello con sus padres. Le siguió Javier Piloto, su pareja. La Policía Local le dejó salir para evitar que se encontrase con las familias, aunque no existen indicios de que hubiese coacción por su parte hacia los menores. A su salida declaró: "Estamos bien, solo estábamos dando una vuelta".

Poco después de las 14.00 horas acabó de declarar la otra pareja: Noelia F., de 14 años, y Abraham V., de 17. Salieron con sus familias y se marcharon en dos coches. La hermana de Noelia, Nerea, expresó el "alivio" por encontrar a los adolescentes y confirmó que "están todos bien. No sabemos lo que ocurrió porque cuando llegamos mi hermana estaba muy nerviosa".

El punto elegido para instalar la tienda de campaña, en la que guardaban escasa ropa, está a unos 200 metros de las primeras viviendas. Se puede acceder en coche desde la PO-313 a cogiendo el cruce de la calle Veiga da Arca, a la altura de la Porta do Cego. Después es necesario desviarse al camino de A Gándara. Fuentes policiales indican que el mayor de edad carece de vehículo propio, por lo que es posible que llegasen a Moaña utilizando el transporte público.

La Policía Nacional de Vigo, tras entrevistarse con familiares y otros allegados de los chicos, barajó varias hipótesis y se centró en tres o cuatro localizaciones donde podían estar los chicos, hasta quedarse con la pista de Moaña al descubrir que Javier tenía familia allí. Y la pista resultó ser certera.