La Guardia Civil detuvo a primera hora de la mañana al agente de la Policía Nacional M.J.M.D. en el coche oficial cuando, con su mujer, llevaba a sus hijos al colegio. Agentes del instituto armado dejaron que la inspectora, M. J. F.H., se presentara voluntariamente en la comandancia de Vigo.

Las escuchas telefónicas ordenadas por el Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo al cabecilla de la mayor red de falsificación de A Pedra revelaron la relación personal con los agentes de la Policía Nacional. Cabe recordar que a raíz de aquel dispositivo se produjo la detención de un guardia civil -tras declarar fue puesto en libertad- acusado de una presunta revelación de secretos.

A la inspectora M.J.F.H. se le imputa un presunto delito de revelación de secretos. A M.J.M.D., su marido, el mismo presunto delito de revelación de secretos y estafa y falsedad a una compañía de seguros.

El subinspector M.J.M.D daba supuestamente cobertura a la red con datos que conocería a través de su mujer. La operación ha sido desarrollada por la EDOA de la Guardia Civil de Pontevedra. Precisamente la jefa de la Udyco (Unidad de Drogas y Crimen Organizado) de la comisaría de Vigo dirigió hace 15 días la operación antidroga en la que fueron detenidos dos guardias civiles en Mos, si bien la investigación de la EDOA sobre ella había comenzado varios meses atrás, con lo que en principio se rechaza cualquier conexión entre ambas.

Tras la alerta que causó la detención de los agentes de la benemérita en Mos, cuando llegó a pensarse en un secuestro, ahora la Guardia Civil ha actuado con total discreción. Según ha podido saber FARO, el comisario y responsables policiales de Vigo conocieron con antelación que se iban a producir los arrestos.