La Sección 5ª de la Audiencia Provincial de Pontevedra con sede en Vigo inició hoy el juicio contra C. A. C. P., un hombre natural de Portugal de 54 años acusado de abusar de dos niñas a las que cuidaba y que contaban con 12 y 9 años cuando supuestamente ocurrieron los hechos. En la vista, celebrada a puerta cerrada, el imputado negó la autoría de los abusos que se le imputan y alegó que la denuncia es una "venganza" contra él a raíz de que le reclamase al padre de las pequeñas supuestos impagos ya que, según su versión, trabajaba para él en la construcción.

Los hechos que se juzgan ocurrieron supuestamente en 2012. La Fiscalía pide para el acusado una condena de 20 años de prisión al acusarle de un delito continuado contra la libertad sexual consistente en agresión sexual así como otro delito continuado de abuso sexual, ambos a menores de 13 años. Según la tesis del ministerio público se aprovechó de las dos pequeñas y además agredió sexualmente a la mayor de ellas. Además de la pena de prisión, en concepto de responsabiliad civil el ministerio fiscal solicita que indemnice a las niñas en una cantidad total de 8.000 euros por daños morales.

El acusado fue el primero en testificar en la vista. Según su versión, el padre de las niñas señaló que lo contrató para trabajar en la construccción, lo acogió en su casa y atribuyó a una venganza la denuncia. Reconoció que le ayudaba con el cuidado de las pequeñas llevándolas al colegio o al parque y negó tajantemente la autoría de los abusos. Indicó además que nunca había tenido problemas con esos temas y que estuvo en la cárcel con anterioridad pero por otros delitos, como robos.

También declararon hoy los padres de las niñas, separados, y que fueron los que denunciaron al acusado. Aunque la custodia la tiene la madre de la menores cuando ocurrieron los hechos estaban viviendo con su padre. El progenitor de las menores negó que contratase al acusado y dice que lo acogió en su casa porque le daba pena ya que según le habían comentado, era buena persona y vivía en una casa deshabitada en condiciones de precariedad.

Los supuestos abusos se destaparon a raíz de que la mayor de las niñas señalase que no quería vivir más con el hombre desvelando que sufrió abusos por parte de él. Desde ese momento echaron al acusado de la casa y ese mismo fue denunciado en la comisaría viguesa. El juicio continúa esta mañana con la declaración de las menores así como de una adolescente que solía visitar la vivienda donde ocurrieron los supuestos abusos. También tienen que testificar ante el tribunal los agentes de la Policía Nacional que llevaron la investigación y los peritos forenses.