La Policía Nacional ha detenido a una mujer de 50 años, vecina de Pontevedra, como presunta autora de un delito de hurto de joyas en un domicilio de la ciudad. La mujer, que era familiar de las propietarias de las alhajas, se llevó sortijas cadenas, anillos, pulseras, collares o medallas valoradas en unos 70.000 euros y que luego vendió en un establecimiento de compraventa.

Las víctimas denunciaron el robo en la comisaría y mostraron su pesar ya que la mayoría de las joyas procedían de la herencia familiar y tenían gran valor (no solo sentimental, también económico) ya que algunas de ellas eran de gran antigüedad. Parte de las joyas fueron recuperadas en un establecimiento de compraventa, pero otras habían sido vendidas y no pudieron recuperarse.