La formación de tornados, a pesar de los avances en meteorología, sigue sin conocerse exactamente. Tampoco resulta fácil medirlos, por lo que se echa mano de la Escala Fujita para determinar la clase de cada tornado. El de Oklahoma es EF4, la segunda más alta y la que recibe el nombre de tornado devastador por generar un viento con velocidades entre 331 y 420 kilómetros por hora, así como por dañar casas, levantar estructuras frágiles y elevar camiones o trenes por el aire.

El predictor de Meteogalicia Lino Naranjo explicaba ayer que los más frecuentes son los Ef0 y EF1, muy débiles o débiles; siendo los de escala cuatro "muy extraños y bastante poco frecuentes".

En cuanto a su formación, detalló que "hay poca claridad sobre su origen pero tiene que ver con la existencia de masa de aire cálido bajo y otra de carácter frío alto. Los tornados se forman en nubes de tormenta con condiciones de alta inestabilidad. Se forman bajo determinadas condiciones y no en cualquier parte del mundo. En Galicia, nunca llegan a la magnitud del de Oklahoma. Con escala cuatro sí se dan en el centro y sur de Estados Unidos y en India".

Por su parte, el físico gallego Jorge Mira explicó que "el mecanismo del tornado de Oklahoma es el mismo del de los tornados gallegos que hubo hace unos meses, solo que en Estados Unidos se da a una magnitud mucho mayor porque en esa zona (conocida como el callejón de los tornados) el terreno es complementame llano. Al no haber barrera montañosa, el aire corre libremente llegando corrientes secas y frías de arriba que se juntan con corrientes húmedas y cálidas del Golfo de México".