Las calles de Lalín fueron escenario en la mañana de ayer de una persecución automovilística al más puro estilo Hollywood. La Guardia Civil detuvo al vecino de Valga M.B.G., de 51 años, que horas antes había robado un coche y se dio a la fuga perseguido por el propio dueño del vehículo en otro turismo y una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico. Durante la persecución el delincuente impactó el coche contra otros tres y, después, lo abandonó en la AP-53 en sentido a Santiago para emprender la huida campo a través. La Benemérita consiguió arrestar al individuo sobre el que pesan antecedentes penales en la pulpería Alto da Pena de Prado después de que hiciera una llamada con el teléfono móvil de uno de los camareros y consumiera una cerveza.

Todo comenzó a las 12.30 horas cuando Nemesio Vázquez aparcaba en doble fila su Opel Vectra cerca del Bar Odeón de Lalín. Lo dejó con las llaves puestas con la intención de pedir cambio de 50 euros en el establecimiento. En ese momento, un individuo se subió al vehículo emprendiendo la marcha a toda velocidad. Acto seguido, Vázquez le pidió prestado el vehículo al dueño del Odeón iniciándose la persecución en él acompañado por aquel y otro amigo. El seguimiento fue por varias calles. El denso tráfico permitió en un momento dado al dueño del coche acercarse e intentar sacar al ladrón del interior, pero sin éxito: resultó herido en el forcejeo que se produjo.

Tras la disputa entre Vázquez y el ladrón de su coche, éste siguió a toda velocidad impactando con tres vehículos, a los que causó daños. A partir de ese instante, el delincuente fue perseguido por la Guardia Civil hasta la AP-53. La patrulla encontró poco después el vehículo abandonado en la autopista, iniciándose entonces la búsqueda monte a través por parte de los agentes, alguno de los cuales sufrieron también heridas después de peinar los bosques. La detención tuvo lugar a las 16.00 horas después de que el delincuente entrara en una pulpería. El individuo pidió una cerveza y, después, el teléfono móvil a uno de los camareros, con el que realizó una llamada que sirvió a la Guardia Civil de Lalín para localizarlo.