La localidad de A Ramallosa, en el municipio pontevedrés de Nigrán, registró ayer un fatal accidente en un paso de peatones. Un camión hormigonera arrolló a una monja, Concepción Berruete Baeza, de 83 años, hermana de las Damas Apostólicas del Sagrado Corazón de Jesús, que falleció en el hospital Povisa de Vigo, horas después del siniestro.

El atropello se produjo pasadas las once y media de la mañana en la Avenida de Portugal, la carretera PO-340, que une este núcleo con el municipio vecino de Gondomar y con Tui. La religiosa regresaba de la misa a la que acudía diariamente a las diez y media en la iglesia de Santa Cristina de A Ramallosa y se dirigía al Pazo de Pías, donde reside su congregación. Caminaba junto a una compañera cuando resultó arrollada por el camión, que circulaba en dirección a Gondomar, hacia la planta de Hormigones Val Miñor, a la que pertenece, ubicada a pocos metros del lugar del accidente.

Según testigos de lo sucedido, el vehículo se encontraba detenido ante el paso de cebra, dado que otros peatones cruzaban la calle. Fue en el momento de reiniciar la marcha cuando atropelló a la religiosa, señalan las mismas fuentes.

Una ambulancia medicalizada del servicio de urgencias de A Xunqueira, muy próximo al lugar del siniestro, trasladó a la mujer en estado muy grave a Povisa, donde perdía la vida a las seis de la tarde.

Una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico se presentó también en la zona, al igual que agentes de las policías locales de Nigrán y Baiona, que regularon el tráfico, colapsado a raíz del siniestro, dado que se trata de un lugar muy concurrido. A escasos metros se encuentra la rotonda que sirve de intersección a cuatro viales procedentes de Baiona, Gondomar, la zona costera de Nigrán y la interior.

La muerte de la hermana causó gran conmoción en el municipio, donde la congregación lleva décadas asentada al cuidado del Pazo de Pías, un bien patrimonial que acoge habitualmente encuentros espirituales y sirve de albergue de peregrinos.

Aunque era de origen navarro, la hermana Concha, como la conocían en la zona, estaba muy vinculada a A Ramallosa. Llevaba cuatro años retirada en la localidad, aunque había estado destinada allí durante una larga temporada antes de ejercer su labor en otros destinos.

Hoy se le practicará la autopsia en el hospital Nicolás Peña de Vigo y, a continuación, sus restos serán velados en el propio pazo. Al cierre de esta edición, se desconocía si el funeral, previsto en la iglesia de San Pedro de A Ramallosa, se celebraría hoy o mañana sábado.