Los tres fallecidos por la caída de una avioneta a unos 500 metros de la localidad de Castalla (Alicante) son el instructor del aparato y una pareja de clientes que había contratado el vuelo.

Fuentes de la investigación han informado a EFE de que el aparato había despegado desde el aeródromo de Mutxamel, cerca de la capital alicantina, y que el lugar de la colisión está cercano al instituto de Castalla, hoy cerrado al ser día festivo en la Comunitat Valenciana.

Según las mismas fuentes, los tres fallecidos eran los únicos tripulantes y murieron en el acto, sin posibilidad de que pudieran ser reanimados por el personal de las ambulancias del SAMU.

Se trata de un hombre de 60 años, de otro varón de unos 50 y de una mujer de unos 30, cuyas identidades y nacionalidades aún no han sido confirmadas.

El accidente ocurrió en circunstancias que se investigan a las 12.37 horas cerca de la carretera que une Castalla con el alto del Xorret del Catí, y varios testigos presenciales avisaron de inmediato a los bomberos y a otros servicios de urgencias.