El hombre de 27 años que se suicidó ayer después de, presuntamente, apuñalar mortalmente a sus padres en una pedanía de Orihuela contaba con una orden de alejamiento en vigor hacia sus progenitores.

Según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), la prohibición de acercarse a sus padres fue emitida el pasado 22 de agosto por el juzgado de Instrucción número 9 de Murcia por motivos que no han sido confirmados.

Además, el juzgado de Instrucción número 1 de Orihuela también había dictado otra orden de alejamiento respecto de las víctimas, como medida cautelar, aunque la misma fue suspendida el pasado 6 de noviembre por el juzgado de lo Penal número 3, al no declarar la madre contra el hijo.

Esta última orden de alejamiento estaba suspendida pero los hechos denunciados que dieron motivo a la referida medida cautelar no figuran como archivados.

Por esta razón, el juzgado de Instrucción número 1 de Orihuela le obligaba a comparecer los días 2 y 16 de cada mes, y, según el TSJCV, así lo hizo hasta el pasado viernes, día 16, su última visita al juzgado.

El matrimonio fue apuñalado hasta la muerte en el interior de su domicilio en una huerta de la pedanía oriolana de Desamparados presuntamente por su hijo, quien horas después se ahorcó en una finca de familiares en Zeneta, a las afueras de Murcia.

Los cadáveres fueron hallados ayer, domingo, sobre las 13 horas por el otro hijo de la pareja cuando acudió al domicilio de sus padres para comer.

El Ayuntamiento de Orihuela ha decretado un minuto de silencio en repulsa por el doble crimen a las 12.10 horas en la plaza anexa al edificio consistorial.