La banda rumana itinerante desarticulada en Pontevedra, acusada de integrar un grupo criminal especializado en robos con fuerza, es una de las más activas que operan en España. En apenas tres meses perpetró más de 60 robos en bares, cafeterías y establecimientos comerciales en las provincias de Pontevedra, Ourense y Burgos, logrando un botín de más de 50.000 euros en metálico, según las fuentes de la investigación.

Los cinco detenidos por la Guardia Civil el pasado miércoles viajaban en sus propios vehículos, se alojaban en hostales y ocultaban el botín en zulos en el monte. Sus golpes, de madrugada, eran rápidos y certeros. Habían sido planificados con antelación y en cuestión de minutos forzaban la entrada de bares, cafeterías y establecimientos comerciales, reventaban las cajas registradoras, las máquinas de tabaco y las tragaperras y huían sin que nadie se lo impidiera. Su suerte se acabó el miércoles pasado, cuando la Guardia Civil logró atraparles en la localidad pontevedresa de Cotobade, como adelantó FARO DE VIGO y anoche dormían en prisión.

El grupo organizado estaba asentado en Barcelona, y sus integrantes se desplazaban habitualmente a Galicia y otras comunidades autónomas para delinquir, regresando a Cataluña con el dinero y el material robado. En concreto, se les imputan 52 robos con fuerza en la provincia de Pontevedra, 7 en Ourense y otros 3 en Burgos, si bien el número de delitos podría ampliarse en los próximos días.

La denominada Operación Gustare se montó el pasado mes de junio, al comprobarse que la las distintas oleadas de robos denunciadas respondían a un patrón similar. Los cinco ciudadanos rumanos arrestados en Cotobade son A.L., de 39 años; C.D., de 26 años; C.F.I., de 29 años; F.P., de 19, y a T.D., de 32 años. Algunos cuentan con numerosos antecedentes y detenciones en breves espacios de tiempo. De hecho, uno de ellos ha sido arrestado en 21 ocasiones por delitos del mismo tipo.

Los investigadores localizaron al grupo rumano y lo sometieron a seguimiento. Su principal objetivo era el dinero de las máquinas recreativas y de las cajas registradoras, pero también el tabaco y, en ocasiones otros efectos. Parte del material robado ha sido intervenido con ocasión de su detención en Cotobade.

La Guardia Civil siguió su pista varios meses y constató que viajaban a Galicia y tras albergarse varios días en hoteles para cometer los robos, regresaban con el botín a su domicilio en Barcelona. Días después repetían viaje a Galicia para una nueva oleada de delitos. En algunos de estos viajes fueron identificados transportando herramientas habituales para la comisión de robos con fuerza.

Los cinco detenidos ingresaron anoche en la prisión de A Lama tras prestar declaración en el Juzgado de Instrucción número 2 de Pontevedra. El magistrado Xermán Varela les imputa pertenencia a banda organizada y robos con fuerza. La desarticulación del grupo se enmarca en la lucha contra los grupos organizados dedicados a la comisión de este tipo de delitos, con el objetivo de mantener o incrementar los niveles de seguridad, según informó ayer la Guardia Civil.