Un operario falleció ayer en la localidad coruñesa de Carral cuando revisaba el funcionamiento de una nevera en una establecimiento hostelero. El trabajador, Manuel Purriños Pérez, de 35 años, manipulaba nitrógeno para comprobar el estado del electrodoméstico cuando se produjo una explosión, una pieza salió despedida y le golpeó en la cabeza. El joven, y natural de Campolongo, falleció en el acto.

El accidente se produjo alrededor de las 10.00 horas en la parrillada El Rincón de Oro. El técnico acudió junto con un compañero de su empresa, San Benito, con sede social en la parroquia cambresa de Anceis, a petición del propietario del restaurante para reparar una nevera. El otro trabajador y el propietario de la parrillada se encontraban en el interior del local cuando se produjo la explosión, aunque resultaron ilesos. El fallecido recibió el impacto de una pieza al ser el que se encontraba más próximo a la nevera. Una ambulancia del 061 y efectivos de la Guardia Civil y Protección Civil se desplazaron al lugar del accidente, aunque no pudieron hacer nada por la vida del joven. La Policía Judicial investiga lo ocurrido. Todavía se desconocen las causas por las que se produjo la explosión mientras el trabajador revisaba la nevera.