Genaro Solla Moares, supuesto autor del apuñalamiento de Andrés González Otaño, "O Cubano", que falleció en el centro de salud de Cangas poco después de la reyerta, ingresó ayer por la tarde en el centro penitenciario de A Lama tras el auto de prisión sin fianza dictado por la jueza sustituta del Juzgado número 2, de guardia cuando se produjo el crimen, el lunes por la noche. El presunto homicida entró a declarar poco antes de las once y media de la mañana, escoltado por guardias civiles, y aunque negó el delito y relató a la juez que actuó en defensa propia para repeler una agresión previa, casi tres horas después salió rumbo a la cárcel. Primero en un vehículo patrulla hasta el cuartel de Cangas y desde allí en un furgón de traslados hasta la penitenciaría de A Lama. Las contradicciones del detenido, su amplio historial delictivo y la "alarma social" generada por este presunto ajuste de cuentas con la droga de trasfondo fueron determinantes.

Según fuentes jurídicas, Genaro Solla declaró que no tenía intención de matar a la víctima, a la que atribuye la agresión inicial y la propiedad del cuchillo, de unos 15 centímetros de hoja, que se habría empleado en el crimen y que la Policía Judicial encontró en el interior del galpón de O Forte donde pernoctaba el detenido. Argumenta que las heridas por arma blanca que sufre en la mano derecha y otros rasguños avalan su testimonio.

Mientras no lleguen los informes de la autopsia y los resultados de las pruebas de ADN no se da por seguro que la causa directa de la muerte sean las puñaladas, y algunos testimonios refieren "problemas de corazón" de la víctima, que recibiría tratamiento por ello, aunque este hecho no se ha confirmado oficialmente. Testigos de la tragedia aseguran que "o Cubano" perdió mucha sangre y las manchas en el pavimento de Rodeira apuntan en esa dirección.

En el entorno de la Casa da Cultura, frecuentado por personas con problemas de adicción a drogas y alcohol, el mutismo inicial fue abriendo paso a expresiones de alivio por la detención de Genaro Solla, al que se refieren por su apellido y de quien destacan su carácter violento. "Si se le atravesaba algo, mal asunto", señala uno de sus conocidos, mientras otro de ellos afirmó: "Es agresivo por cualquier motivo".