Santiago Elecalde, el principal acusado de atracar en su casa y disparar al propietario del céntrico bar de Ourense La Coruñesa, admitió ayer en la Audiencia que aquel 12 de mayo de 2009 acudió con otro amigo –el también procesado Rubén Óscar Sierra– a la sexta planta del número 2 de la calle Roi Páez para asaltar a Manuel Oliveira, que según habían podido averiguar esa misma noche "tenía droga y mucho dinero en casa". La Fiscalía y la acusación piden en total 29 años de prisión para los cuatro acusados por delitos de tentativa de homicidio/asesinato, robo, atentado contra agentes de la autoridad y tenencia ilícita de armas.

Elecalde contó que asaltaron a la víctima justo cuando el hombre salía de su casa para ir a trabajar. En un forcejeo, según el acusado, la pistola que llevaban se disparó de forma accidental: "Le pusimos cinta en las manos y en la boca pero no teníamos intención de disparar".

Por su parte, la víctima explicó que cuando salía de su casa se encontró con dos encapuchados que le dieron una paliza: "Me dieron con una maza en la cabeza y muchos golpes; cuando estaba atado me dispararon en el tórax". Añadió que pudo quitarle la capucha al autor del disparo, reconociendo a Elecalde, un cliente que había ido a su bar días atrás. Al parecer, el hostelero les ofreció la cartera con más de 5.000 euros que tenía en el bolsillo, dos anillos y un reloj, pero los atracadores no lo quisieron y le pidieron una cantidad más grande que según ellos tenía en casa.

El ruido alertó a una vecina que llamó a Comisaría. La llegada de seis agentes frustró el atraco, si bien antes de la detención de los dos encapuchados se produjo un tiroteo. Además de los dos acusados que estaban allí en ese momento, se arrestó a otros dos en un hostal de la ciudad.