Los restos óseos hallados en el pozo de Jinámar (Gran Canaria), dentro de la investigación por la desaparición de Sara Morales, no son humanos, según confirmaron a Europa Press fuentes de la investigación.

Las dimensiones y características de los huesos encontrados hacen descartar, según las mismas fuentes, que correspondan a los dos niños desaparecido en la isla, Sara Morales y Yeremi Vargas, a la espera de la prueba forense.

La jefa superior de la Policía en Canarias, Concepción de Vega, explicó esta mañana, cuando se dieron por finalizados los trabajos, que lo único que habían encontrado eran "algunos restos y algún hueso de menor tamaño" que se han remitido para su análisis, sin concretar si eran o no humanos.

Por su parte, desde el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas aseguraron este viernes no haber recibido ninguna prueba para analizar de los trabajos que durante los últimos cinco días ha llevado a cabo la Policía Nacional en el pozo de la localidad grancanaria.