El Tribunal Supremo ha reducido en un total de 24 años de cárcel la sentencia impuesta a tres de los pederastas del caso Nanysex por la Audiencia madrileña el año pasado, al aplicar correcciones técnicas y estimar parcialmente las alegaciones presentadas en los recursos de casación. En el caso de Álvaro Iglesias Gómez, alias "Nanysex" –considerado uno de los peores pederastas descubiertos por la Policía–, rebaja la pena de cárcel de 58 años a 44 años y medio por abusar sexualmente de cinco niños de uno y dos años mientras les cuidaba, entre los años 2002 y 2004, en Collado-Villalba (Madrid) y en Murcia.

El joven ourensano José Gómez Cansino también se ve beneficiado con la sentencia del Alto Tribunal, que rebaja de 31 años y medio de cárcel a 25. La medida reduce además en cuatro años de cárcel la pena de Eduardo Sánchez Moragues, que cumplirá 10 años y medio de cárcel. La sentencia mantiene la pena de 3 años impuesta a Antonio Olmos Marzal por distribuir material pornográfico.

La reducción de condenas se produce por cuestiones técnicas aplicadas por el Alto Tribunal. Así, elimina la agravante de abuso de confianza en los delitos de abusos sexuales (Nanysex y Gómez Cansino cuidaban a los menores víctimas de abusos) pues se las había aplicado la de especial vulnerabilidad de la víctima, y aplica el Código Penal anterior a la reforma de 2003, más beneficioso para los condenados. La sala, además, engloba en el mismo delito la corrupción de menores, la elaboración de material pornográfico con menores y su posterior distribución.

En el juicio, "Nanysex" reconoció que abusó de los cinco niños y manifestó que le habían ofrecido someterse al tratamiento de castración química, al que accedería "si fuera necesario".

Álvaro Iglesias, que fue detenido por la Policía el 26 de mayo de 2005, se ofrecía como "canguro" para acercarse a los niños y grababa sus actos de abusos a menores en vídeos que posteriormente intercambiaba con los otros procesados a través de Internet.

La Audiencia madrileña consideró probado que "Nanysex" además de efectuar tocamientos a los niños, les obligaba a practicarles felaciones y se masturbaba en presencia de los menores, aprovechando su trabajo de canguro.

Por su parte, el ourensano José Gómez Cansino fue condenado por dos delitos de elaboración de material pornográfico con menores y además por haberlo difundido. Ahora el Alto Tribunal le rebaja la pena al estimar que la difusión de este material "carece de autonomía penal propia cuando quien efectúa aquella es el mismo que lo elaboró empleando a menores".

El pederasta ourensano que estudiaba Químicas en la Universidad de Vigo, grabó dos vídeos con dos niños menores en de esta ciudad a los que se ofreció a cuidar por amistad con su familia. Con ellos grabó felaciones y tocamientos que fueron intervenidos en casa del también condenado Antonio Olmos Marzal, a quien se los remitió "Nanysex". Ambos menores presentan traumas psicológicos.

El pasado mes de junio funcionarios de la prisión de Madrid donde estaba internado Gómez Cansino, halló en su poder y en el de otro pederasta agendas de fotos y CD con material pedófilo: bebés recortados de publicaciones médicas y fotografías de menores de su barrio.