Una huida que apenas duró unas horas. El conductor que la madrugada del pasado domingo atropelló mortalmente a un peatón portugués en Ponteareas se entregó en el cuartel de la Guardia Civil de esta localidad pontevedresa y alegó que no se paró en el lugar del siniestro al pensar que había arrollado a un animal. El detenido, D.M.D.C., un ponteareano de 53 años de edad, conducía una furgoneta sin seguro y, tras declarar ante la juez, quedó en libertad con cargos: la magistrada le imputa los supuestos delitos de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro.

El trágico accidente ocurría en torno a las tres de la madrugada en el kilómetro 645,800 de la carretera N-120, a la altura de la parroquia ponteareana de Area. La víctima, Luis Filipe Rocha Gancho, de 43 años, era un chófer de autocar que se encontraba en Galicia ya que había trasladado a un grupo de pasajeros a Mondariz y que esa noche decidió ir con otros compañeros de profesión, también lusos, a un local nocturno de la zona. Al salir del establecimiento, al parecer enfadado, echó a andar por la carretera, momento en el que fue atropellado.

El cuerpo sin vida del peatón fue hallado en medio de un charco de sangre y rodeado de restos de cristales del vehículo que lo atropelló, que se dio a la fuga. Una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico del destacamento de O Porriño se trasladó al lugar e inició las indagaciones para esclarecer la identidad del conductor fugado, para lo que se contó, según informó ayer la Benemérita, con la colaboración de varios testigos. También participó en la investigación un equipo de la Policía Judicial del Automóvil de este cuerpo, unas gestiones que, añade el Instituto Armado, dieron lugar a la identificación del piloto.

Detención

La detención del conductor se producía apenas veinte horas después del accidente, tras presentarse él mismo en el cuartel de Ponteareas en torno a las once de la noche de ese domingo y confesar la autoría del atropello. El hombre alegó ante los agentes que no se dio cuenta de que había arrollado a un peatón, sino que pensó que atropellara a un animal, motivo por el que, añadió, no se detuvo en el lugar del siniestro. La Guardia Civil de Tráfico, en un comunicado emitido ayer, informó de que se procedió a la detención de este vecino de Ponteareas, que en el momento del atropello mortal conducía una furgoneta Citroën Berlingo sin seguro.

Tras entregarse a la Benemérita, el conductor declaró ayer como imputado ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Ponteareas, que lo dejó en libertad bajo la imputación de supuestos delitos de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro, según la información facilitada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). De mantenerse esta acusación, el piloto se enfrentaría a penas de cárcel en el futuro juicio.