Según ha declarado a los periodistas la mujer Hana M. -que tiene tarjeta de residencia y es trabajadora en un centro escolar de Ceuta, a través de un programa del Plan de Empleo de la Delegación del Gobierno- presentó una primera denuncia en la embajada de España en Siria en diciembre de 2008 y ahora ha elevado otra a la Audiencia Nacional y a una sección del Ministerio de Exteriores, que actualmente está en proceso.

La mujer ha pedido la mediación de la Embajada de España en Siria para resolver la retención de su hija en Damasco, donde actualmente reside el padre.

La mujer se desplazó a finales del pasado año hasta Siria en compañía de su niña, de tan sólo 6 años y de nacionalidad española, para visitar a su madre, que se encontraba gravemente enferma.

La mujer tenía previsto regresar a Ceuta el día 8 de enero pero se le comunicó que existía una orden de prohibición de salida del país para la pequeña.

La mujer, Hana M., no pudo abandonar Siria hasta principios de marzo porque la ex pareja de esta mujer y padre de la niña firmó un documento, rubricado también por un juez religioso de Damasco, por el que se impide la salida de la menor, que según este país tiene nacionalidad siria.

El abogado Ignacio Asencio, natural de Ceuta, ha informado de que la retención podría derivar en un secuestro internacional.