El dispositivo de búsqueda se puso en marcha en la madrugada del día 25, cuando su hijo alertó de que su padre no había regresado a casa, según informaron a Europa Press vecinos de la localidad, de 200 habitantes y situada al sureste de la provincia.

Finalmente, fue un pastor que formaba parte del dispositivo quien le encontró el cadáver en el término municipal de Santa María del Berrocal.

El hombre D.G.G, según los carteles distribuidos por la comarca se le describía de 1,62 metros de altura y unos 55 y 60 kilos y que vestía una cazadora-impermeable azul marino, pantalón marrón, zapatillas de estar en casa, boina negra y gafas de cristal grueso.