La Policía vasca investiga ahora, según ha informado hoy el departamento de Interior, si los restos aparecidos en Sopuerta corresponden a un vecino de Bilbao de 30 años cuya desaparición el pasado día 11 de noviembre fue denunciada por su esposa.

Los investigadores sospechan que el desaparecido podría haber sido víctima de una muerte violenta.

Fuentes policiales han señalado que un perro policía señaló ayer en esta zona montañosa de Sopuerta un lugar donde, en principio, podría haber un cuerpo enterrado.

Posteriormente, otro perro halló idénticos indicios en la misma zona -que aún permanece acordonada- y los agentes comenzaron la búsqueda del cadáver, que finalmente ha sido hallado hoy.