Las empresas que se constituían a nombre de Teresinha de Jesús o las que se adquirían a su nombre tenían entre su patrimonio numerosos inmuebles que cambiaban así también de manos. Incluso un paquete de 610 acciones de Iberia formaban parte del capital social de una de las firmas. Además, realizó inversiones por valor de 60.000 euros en la sociedad Arte y Naturaleza Gespart. Esta operación se repite en otros muchos de los imputados, algunos familiares de Pouso Rivas. Él mismo hizo una inversión de 600.000 euros en esta sociedad.

Pero en la operación "Cormorán" también se encontraron grandes cantidades de dinero en efectivo pendientes de blanquear escondidos en los inmuebles intervenidos en toda España. En el registro de un hotel de Serra de Outes cuya habitación compartía el acusado con otra de las acusadas había 24.000 euros en un maletín y 462.300 euros en una caja fuerte. En los inmuebles vinculados a Teresinha también fueron hallados, por ejemplo, 830.960 euros y 345.387 dólares americanos.

Pouso incluso disponía, según el fiscal, de albañil propio para hacer obras de mejora en los inmuebles que adquiría a través de esta red así como habitáculos "para la ocultación del metálico procedente del narcotráfico". Este hombre era A.G.E., que creó una empresa de construcción cuyo único cliente era el principal acusado y con el que facturó al menos 390.245 euros. El fiscal pide 5 años de cárcel para él.