"Nos hemos confundido; este no es". La banda de sudamericanos -sólo uno parecía español- se dio cuenta enseguida del error cometido Pero ya era tarde, así que, antes de abandonar la vivienda, decidieron saquear la casa. "No he hecho una valoración económica de lo que me han llevado; pero es mucho", comenta el dueño del inmueble, mientras unos familiares instalan una reja en la ventana del baño por la que logró entrar uno de los delincuentes.

El momento en el que fue encañonado fue muy duro. Pero después, admite, ya no temió por su vida. "Estaban tranquilos, nada nerviosos, y reconocían que se habían equivocado", relata. De la persona a la que buscaban, les escuchó decir que tenía mucha "plata". "Era de noche, no conocen esta zona y se confundieron", razona este vecino de Vigo.

Las primeras indagaciones policiales ya dieron sus resultados: en una finca propiedad de la familia ubicada a unos 200 metros de la vivienda se localizó un pasamontañas, varias prendas de ropa y las bridas que utilizaron para maniatarlos.