"Hay que actuar cuanto antes y anticiparse a lo que pueda venir". Con esta declaración de principios, la Xunta tomó ayer las decisiones más contundentes hasta el momento para intentar frenar el avance en Galicia del coronavirus. Son un conjunto de restricciones y prohibiciones que afectan a la educación, la sanidad, los servicios sociales, el transporte y las celebraciones populares que tendrán una vigencia de dos semanas. "Estamos en una situación extraordinaria y tomamos medidas extraordinarias que pueden ser incómodas y afectar a la vida de los ciudadanos y a la economía, pero se hace por responsabilidad", indicó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que citó como una de las causas la "avalancha" de personas que llegan a Galicia de otras comunidades y que han dado positivo en las pruebas del coronavirus.

Sin clases hasta el día 30

La medida de mayor calado es la suspensión hasta el 30 de marzo de las clases en todos los niveles educativos, desde las guarderías hasta las universidades, así como de todas las actividades extraescolares. La decisión se adoptó al mediodía en la reunión semanal del Ejecutivo gallego, antes de que el Gobierno central recomendara cerrar las aulas en toda España, como luego hicieron todas las comunidades autónomas. La prohibición formal de acudir a clase entra en vigor el lunes y las guarderías, colegios, institutos y universidades permanecerán cerrados durante dos semanas, pero la Xunta recomendó que hoy tampoco acudan. Si se permite hoy es solo como una solución paliativa para los padres que no encuentren alternativas para dejar a los hijos.

Son catorce días sin asistir a clases, pero el plazo concreto se determinará según evolucione la epidemia. "¿Pueden ser suficientes dos semanas? La respuesta es sí", comentó Núñez Feijóo, para a continuación deslizar, en todo caso, que se trata de una previsión "prudente" y que siendo "pesimista", que él lo es, igual hay que ampliar el plazo. El personal docente y el no docente, no obstante, seguirá en sus puestos, acudiendo a los centros aunque pueden conciliar si tiene hijos menores. La idea de la Xunta es promover un sistema para que sigan impartiendo clase online, poniendo deberes o encargando tareas genéricas para que los estudiantes sigan el curso desde casa, pero que eso requiere de una infraestructura tecnológica de la que no disponen todos los colegios. De ampliar el calendario escolar, la Xunta de momento no lo plantea.

Servicios sociales

El Gobierno gallego cierra los centros sociocomunitarios y suspende las actividades en los centros de día de mayores y de menores, centros ocupacionales, así como en los puntos de atención a la infancia, ludotecas, residencias de tiempo libre y albergues juveniles. Además, se limitan las visitas a los residentes mayores de 70 años o con patologías cardíacas o respiratorias previas y se prohíben visitas de personas con síntomas respiratorios o fiebre y se tratará de evitar que se agrupen en espacios reducidos. En los hosopitales, solo un visitante por paciente.

Fiestas, ferias y mercados

En actividades públicas en espacios abiertos, ya sean de ocio, culturales o similares, se limita la participación a un máximo de mil personas. Restricción que se hace efectiva también a ferias, fiestas populares y mercadillos. En espacios cerrados, el máximo es de 50 personas o un tercio del aforo cuando supere esta cifra, pero sin sobrepasar las 500 personas.

Museos y bibliotecas

La Xunta echa el cierre a sus museos, archivos y bibliotecas y pide a las demás instituciones públicas y privadas que hagan lo mismo con sus instalaciones similares.

Deporte

La Administración autonómica anula las actividades del programa de deportes Xogade y recomienda la suspensión o celebración a puerta cerrada de todas las actividades deportivas, incluyendo las municipales, en las que haya asistencia de público.

Función pública

Los empleados públicos de sanidad, educación o servicios sociales se rigen por un modelo específico, para los demás funcionarios de la administración general, la Xunta impulsará el teletrabajo y la flexibilidad horaria, además de marcar indicaciones para la atención al público, como situarse a más de un metro de las administraciones en la atención presencial.