La lluvia, ansiada durante tantos meses de sequía, se ha dejado notar en Galicia durante las últimas semanas. El paso de las borrascas "Félix" y "Gisele" y sus precipitaciones han aumentado significativamente el nivel de los embalses, pero también han dejado huella en la naturaleza.

Aunque tanto "Félix" como "Gisele" han dejado un buen reguero de incidencias, también han devuelto la vida a arroyos y cascadas que vuelven a brotar con fuerza.

Con todo, en el apartado de consecuencias negativas, también toca fijarse en el arrastre de cenizas de los terrenos arrasados en la ola de incendios y que ha afectado al agua para el consumo en Ribadavia (Ourense).

Predicción

Este domingo Galicia quedará marcada por la inestabilidad atmosférica debido al régimen de vientos del noroeste y al aire frío en capas altas. Así, se esperan cielos parcialmente cubiertos con chubascos que comenzarán a caer en las primeras horas por el tercio norte de la comunidad y que con el avance del día llegarán a cualquier punto.

La cuota de nieve se mantendrá entre los 800 y 1.000 metros y las temperaturas seguirán sin cambios significativos. Hoy la mínima se registraba en Carballeda de Valdeorras con -6,3 grados.

El lunes el invierno se despedirá con otro día más de frío sobre Galicia. Los cielos estarán parcialmente nublados con chuvascos más frecuentes por la mañana. La cota de nieve descenderá hasta los 500 metros.