Las previsiones se cumplieron y la nieve dejó paso a la lluvia. La entrada del viento del sur hizo que se recuperasen los termómetros, aunque las temperaturas no superaron los 12 grados centígrados, máxima que se registró en Vigo. Sin embargo, el viento cálido del sur no solo "ahuyentó" a la "Bestia del Este" que congela Europa, sino que trajo las lluvias, acompañadas de rachas de vientos fuertes. Ayer, la comunidad estuvo en alerta amarilla por potentes rachas del viento, que alcanzaron los 116 kilómetros por hora en Areas (Tui) y en Oia.

"Para el fin de semana se aguarda un tiempo inestable, aunque dentro de la normalidad en un tiempo de invierno", afirmó María Souto, de Meteogalicia. Será un fin de semana con lluvia y vientos, de componente suroeste, moderados en general y fuertes en el litoral. De hecho, se ha activado la alerta naranja en el mar por este fenómeno adverso. No se aguardan nevadas más allá de las zonas de montaña de Lugo y Ourense.

Así, las condiciones atmosféricas podrían "aguar" la Festa da Arribada. Para hoy por la tarde se espera, sin embargo, que los chubascos den un respiro a la popular fiesta de Baiona, y lo mismo se prevé para el domingo por la mañana.

Como contraste, se prevé que las temperaturas "sean bastante agradables". Así, es probable que las máximas se sitúen en los 14º en muchas zonas de la comunidad, entre ellas las Rías Baixas, mientras que las mínimas se recuperarán a valores positivos hasta los 8º en Vigo y los 4º en Lugo. En la tarde-noche del domingo, la situación meteorológica volverá a complicarse.

Mínima de Galicia

El municipio ourensano de A Veiga registró ayer la temperatura mínima de Galicia en una jornada con 40 provincias españolas con riesgo (amarillo) o riesgo importante (naranja) por aludes, fenómenos costeros, deshielos, lluvias, nevadas, tormentas o viento, entre ellas las cuatro gallegas.

Según los registros de MeteoGalicia, en la madrugada del viernes las temperaturas mínimas en la comunidad correspondieron a municipios ubicados a más de 900 metros de altitud como los ourensanos de A Veiga (-6,6) y Carballeda de Valdeorras (-6,1) y los lucenses de Pedrafita do Cebreiro (-5,1) y Cervantes (-5). Mientras, en localidades con altitud menor de 900 metros la mínima correspondió a Antas de Ulla (Lugo) y Baltar (Ourense), con -1,5 grados centígrados.

La presencia de placas de hielo en puntos de la red viaria gallega complicó ayer la circulación en zonas como Eume, Deza y A Paradanta y causo varios accidentes de tráfico.

Según informó el 112 Galicia, el Centro Integrado de Atención de Emerxencias (CIAE) registró dos accidentes de tráfico sin heridos, pero que fueron ocasionados por la presencia de hielo en la calzada. En A Capela, una furgoneta se salió de la vía en la carretera que une Pontedeume con As Pontes. La AC-564, según informaron varios conductores al 112 Galicia, estaba cubierta en diversos puntos por placas de hielo. Poco después, en el ayuntamiento coruñés de As Pontes tuvo lugar otro accidente en el que un coche sufrió una salida de vía debido a las condiciones en la que se encontraba la calzada.

En ninguno de los casos anteriores hubo personas heridas, pero sí en A Cañiza (Pontevedra), donde tres vehículos chocaron en la autovía A-52, en la salida del túnel en dirección a Ourense. Como consecuencia del golpe, una mujer resultó herida.