La acumulación continua de purín -el líquido que rezuma el estiércol formado por la orina de los animales, la lluvia y otros líquidos de los excrementos del ganado- sin un plan serio de gestión de residuos se está conviertiendo en un "problema internacional" que en Galicia tiene una primera magnitud.

Así, lo explicó Sereafín González, presidente de la Sociedade Galega de Historia, en la conferencia de ayer. "A pésima xestión de residuos gandeiros convertuse nun problema ambiental, nun problema internacional (...) Pedimos que se racionalice -la generación de estos residuos-, pero a Xunta non fai caso".

Por su parte, Felipe Bárcena explicó que cuando se desecó la Lagoa de Antela en la década de los 50 del pasado siglo se buscaba, en teoría, "atajar el paludismo", por lo que el gobierno de la Dictadura desarrolló un plan general para toda España consistente en eliminar las lagunas existentes.En Galicia, además de la de Antela, desapareció la de Coristanco. Esos terrenos fueron secados para convertirlos en agrícolas y donarlos a colonos.

Antonio Villarino explicó que "se había intervenido en la desembocadura del río Po, en Italia", y desde España se quiso "copiar" parte de esa estrategia. "Antela y otras lagunas se secaron por un motivo económico, fue un momento histórico. No se respetó nada, ni la vía XVIII ni puentes ni la laguna y así quedó. El problema es que siguió y que se sigue con la misma mentalidad", criticó.

"Acumulamos dous séculos de desfeita na Limia", agregó Serafín González, recordando que los primeros intentos de secar la laguna se dieron en el siglo XIX. "Era un pastel moi goloso a cambio de quedarse coas terras", añadió.