Un juzgado de la Seu d'Urgell (Lleida) ha dejado a un paso de juicio a los padres de Nadia, acusados de un delito de estafa por los 1,1 millones de euros que recaudaron en donativos que solicitaban para sufragar gastos de curación de la enfermedad rara que sufría la menor. El auto señala que los padres "habrían estado dedicándose de forma conjunta a orquestar una estafa, sirviéndose para ello, de su hija".