Con las Cíes como acompañantes de excepción, decenas de personas se acercaron ayer hasta el Museo del Mar en la primera jornada de exposición de las cantigas de Martín Códax. Su puesta de largo llegó el martes con un acto exclusivo para autoridades y representantes de la cultura, la música y la literatura gallega. Los más curiosos no quisieron dejar pasar más tiempo y acudieron raudos al emplazamiento costero, que hoy espera una avalancha de visitantes con motivo de la jornada festiva. "Es una muestra maravillosa que los vigueses tenemos la suerte de tener al alcance de nuestros dedos. Es una visita obligada para todos", comenta Mónica Lago, una de las pocas afortunadas que hace dos días disfrutó de la visita guiada de Francisco Singul, comisario de la exposición. "Fue un privilegio, pero hoy -por ayer- me apetecía venir por mi cuenta para volver a empaparme de la obra de Martín Códax", añade mientras dibuja en su libreta una escultura de granito del año 1.250 que acompaña al Pergamino Vindel en la sala.

Al ser un día laborable, buena parte de los presentes ayer en el Museo del Mar eran vigueses. Aunque no todos. El gaditano Emanuel González está pasando unos días en la ciudad visitando a su novia Gala. Ayer acudió al recinto para conocer un poco más de la historia de la literatura gallega. "Es una muestra magnífica y se te pone la piel de gallina paseando por aquí. Verla y descubrir todos sus secretos me hace estar muy unido a Galicia", comenta el joven. "Lo que no entiendo es por qué esta exposición solo dura unos pocos meses. Debería quedarse aquí muchos años para que todos los turistas que lleguen a la ciudad puedan con disfrutarla", apostilla su pareja.

El pintor Darío Basso tampoco se quiso perder la primera jornada de puertas abiertas para el público. Él también estuvo en la inauguración del martes. Su motivo era muy especial: tres de sus cuadros están presentes junto al Vindel. "Es un orgullo que hayan pensado en mí para decorar una exposición de este calibre", indica. Los tres lienzos tienen una estrecha relación con las Cíes bañadas por las ondas do mar de Vigo que inspiraron al trovador gallego. "Estuve unos días en la casa de un lugareño y ahí pinté estos cuadros", reconoce mientras añade otra singular ligazón con la muestra. "Yo estudié en el colegio Martín Códax", apunta.

Hay quien se acercó al Museo del Mar por azar. "Sabíamos que hoy ya se podía visitar pero aprovechamos que celebramos una comida aquí cerca para pasarnos por la exposición", señala Begoña Davila, quien celebra la apuesta de las instituciones por recuperar y exhibir las cantigas. "Nos brindan una oportunidad única para conocer más sobre la historia gallega. Estos poemas son patrimonio de todos y los vigueses, gallegos y visitantes deben aprovechar la oportunidad que les han brindado", añade.

La exposición "Pergamiño Vindel. Un tesoro en sete cantigas", de acceso gratuito, se podrá visitar hasta el próximo cuatro de marzo durante seis horas diarias, salvo los lunes. De martes a viernes abrirá de 10.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 19.00 horas. Los fines de semana y festivos, como hoy, lo hará una hora más tarde: de 11.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas. Se celebrarán visitas guiadas todos los días a las 12.00 y las 18.00 horas.

Darío y Darío | Visitantes

"Es un orgullo que hayan pensado en

mí para decorar la exposición del Vindel"

Mónica Lago | Visitante

"Es una muestra maravillosa que los vigueses tenemos al alcance de la mano"

Begoña y Teresa | Visitantes

"Esta oportunidad nos permitirá conocer mucho más sobre la historia gallega"

Jesús, Gala y Emanuel | Visitantes

"Ver esta exposición y descubrir sus secretos me hace estar muy unido a Galicia"