La banda portuguesa The Gift está más internacional que nunca. En días, tocarán en la Semana de la Música de Sao Paulo y ya lo han hecho en Londres, Berlín, Nueva York. Mañana arrancan gira española en Vigo, en el Teatro Afundación. Nuno Gonçalves promete 90 minutos apoteósicos. Del público dependerá que sean más. Las entradas, en la taquilla de Afundación, casi agotadas.
- Su último disco, "Altar" , germinó en Vigo donde les vio Brian Eno en un concierto, ¿qué supone para usted actuar aquí?
-Para nosotros tiene un significado especial.Queríamos que el primer concierto de la gira española fuese en Vigo, queremos seguir con energía el tour del resto de España. Leonard Cohen cantaba F irst we take Manhatan, then we take Berlin. Nosotros decimos First we take Vigo, then we take Berlin.
- ¿El directo será para decantarlo en la butaca o buscará hacer bailar al público?
-El hábitat natural de The Gift siempre ha sido el teatro donde empezamos. Ha sido la filosofía primordial de la banda; pero eso no significa que sea una ópera, no significa que todo el mundo tenga que estar ahí sentado. Si quieren bailar, que bailen. Considero que este concierto será una experiencia increíble donde vamos a presenciar nuestro nuevo disco, "Altar" , con el que hicimos una gira de casi 40 conciertos en teatros de Portugal donde funcionó muy bien. Nos gusta tener al teatro bailando y, en la otra cara de la moneda, tener a la gente sentada disfrutando del concierto. Habrá un lado más íntimo y personal y otro más explosivo.
- Ese formato recuerda al tour de presentación de "Primavera".
-La gira Primavera-Explode estaba dividida en dos. En este caso, no vamos a dividirlo en dos partes. Vamos a dar un concierto enfocado en "Altar" pero también vamos a recorrer nuestra carrera de más de 20 años. Lo importante es disfrutar de una noche que creemos que va a ser mágica.
- Ustedes se crecen tanto en directo que conozco a gente que no daba un duro por ustedes y salió de la sala ultra convencida.
-Hoy por hoy, nuestra vida en general es muy rápida. Infelizmente, perdemos el tiempo. Hace diez años, si querías escuchar un disco, lo escuchabas. Si quieres ver una película, la ves desde el principio al final; no la ves dos minutos. En la música, la gente se deja influenciar por una canción que escucha en la radio o un link en una red social pero no se le dedica al grupo el tiempo que debería tener. En directo, la gente toma el tiempo necesario para conocer a una banda. Hoy por hoy, tenemos que combatir el desprecio que hay por las bandas.
- ¿Qué puede adelantar de la escenografía y puesta en escena?
-No puedo revelar sorpresas pero The Gift siempre ha tenido una visión especial de los argumentos escénicos. Lo que puedo garantizar es que es un concierto top a nivel mundial. La gente va a disfrutar de un concierto con muchos cambios. Cada dos o tres canciones, aparecen cosas nuevas. Es muy dinámico en ese sentido. Podemos bajar y subir telas, luces, es la gran clave. Hoy por hoy, el concierto de una banda tiene que ser un conjunto de todo, de imagen, de sonido, de tocar bien. Muchas veces, los grupos se olvidan de que deben tocar bien. Tenemos siete músicos en el escenario que son muy buenos que hacen que las canciones en el escenario ganen un punto. Es un espectáculo rico en términos de polifonía.
- Entre 2015 y 2016, la facturación de los directos en España aumentó a pesar de disminuir el número de actuaciones.
-Yo soy músico. Todo lo que está alrededor de la industria es un problema de la industria. Cada banda tiene un público. No puedes vender leche como si fuese vino. Las bandas deben saber para quién quieren tocar. En el caso de The Gift, seguimos tocando mucho. No lo hacemos para conseguir financieramente un objetivo sino para llegar a más gente. Algo que me frustra es ver a una banda grande que no invierte en el escenario, en las luces. Me parece ser caradura. Un músico hoy tiene que pensar de forma global, que el directo incluya firmar autógrafos al acabar, tener una buena tienda para vender el producto. Nosotros intentamos sobrevivir todo lo que podamos. Lo hemos conseguido durante 22 años: algo estaremos haciendo bien. Si una banda se queda en casa es porque algo está haciendo mal.
- En cuanto a la piratería, ¿les afecta mucho?
-Yo prefiero tener cinco discos pirateados en casa de un chico y que vaya al concierto y lo disfrute. Si es una forma de promocionar la música, está bien. Lo que no me gusta es la piratería para buscar lucro. Si alguien la vende de forma no oficial música de The Gift no me gusta. La piratería está asociada a falta de recursos y gusto por la música. Una persona que piratea un disco de The Gift porque no puede comprarlo es siempre bienvenido.
