Decía Baltasar Gracián ya en el siglo XVII que "lo bueno, si breve, dos veces bueno", y esa máxima se puede aplicar a Twitter. El anuncio de la red social del pajarito de que doblará la capacidad de sus tuits ha hecho trinar a buena parte de sus usuarios, que ayer discutieron sobre la cuestión con la etiqueta #280caracteres. Muchos prefieren la concisión de los 140 que caracteriza a este servicio de microblogging desde hace once años y medio, y expertos como el gallego Enrique Dans y José Luis Orihuela se han mostrado contrarios a la medida.

La compañía con sede en San Francisco comunicó que un pequeño grupo de usuarios de distintas lenguas ha sido seleccionado de forma aleatoria para poder tuitear con 280 caracteres. La decisión de doblar la capacidad de los tuits no es firme, aunque Twitter confía en que el experimento salga bien. "Aunque confiamos en nuestros datos y en el impacto positivo que tendrá este cambio, queremos probarlo con un pequeño grupo de gente antes de tomar la decisión de lanzarlo para todos", explicó la compañía estadounidense. "Entendemos que dado que muchos de vosotros lleváis años tuiteando, puede haber un vínculo emocional con los 140 caracteres. Nosotros lo sentíamos también. Pero hemos probado esto, hemos visto lo que puede hacer, y nos hemos enamorado de este nuevo, y aún breve, límite", añadió.

Twitter aduce que una de las razones del cambio es que falicitará la expresión en varias lenguas que a menudo llegan al cupo máximo de caracteres en sus mensajes. Entre ellas, el español, el inglés, el portugués y el francés. En cambio, los usuarios que emplean el japonés, el chino o el coreano -y donde se utilizan caracteres kanji- pueden "decir más con menos" respecto a los que usan el español, el inglés o el alemán -que utilizan caracteres del alfabeto occidental-.

Solo un 0,4 % de tuits enviados en japonés alcanza los 140 caracteres, mientras que en inglés ese porcentaje se eleva al 9%; además, la mayoría de los tuits japoneses tiene 15 caracteres y esa cifra sube a 34 en los redactados en inglés. No hay datos referentes al español, pero es previsible que los tuits en castellano sean, en promedio, aún más largos que en la lengua de Shakespeare.

El cambio, de producirse definitivamente, "hará más fácil el uso de una cuenta sin renunciar a los valores originales de brevedad y rapidez", asegura Twitter.

La reacción no se hizo esperar. Una usuaria recogió un tuit de 280 caracteres del presidente de Twitter, Jack Dorsey, y tachó palabras hasta reducirlo a 140, demostrando que se podía expresar la misma idea en el espacio original sin perder su sentido. Dorsey (@jack) encajó las críticas y chanzas con deportividad y pidió tiempo para demostrar las ventajas del cambio. Otros ironizaron con que "Trump podrá finalmente decir lo que está pensando".

Bromas aparte, el experto gallego en nuevas tecnologías y profesor de la IE Business School Enrique Dans se mostró contrario a cambiar algo que "se había convertido en parte de la identidad de Twitter". "Twitter me ofrece información en píldoras de consumo inmediato. En muy poco tiempo, me entero de qué cosas relevantes han ocurrido en mi entorno -explicó-. Dado que el rasgo diferencial de Twitter para mí era la parsimonia y la brevedad, terminaré por consumir esas píldoras en otro sitio. Y será una pena, porque me encanta Twitter", lamentó.

Por su parte, José Luis Orihuela. profesor en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra y autor de libros sobre Twitter, confesó que no le gusta "nada" el cambio. "La restricción del límite de caracteres es la seña de identidad del servicio, un aliciente para afinar la escritura y un homenaje a la economía de la información", argumentó.

Está por ver si la ampliación acabará con los "hilos", ahora tan de moda en Twitter. Lo que es seguro es que este cambio radical en la red social del pajarito traerá cola.

Enrique Dans | Profesor de la IE Business School

"El rasgo diferencial de Twitter para mí era la parsimonia y la brevedad. Es una pena"

José Luis Orihuela | Experto en Twitter

"No me gusta. La restricción del límite de caracteres es la seña de identidad del servicio"