El profesor vigués Carlos Lago ha logrado la primera cátedra en Galicia de Ciencias de la Educación y el Deporte; algo histórico en los 17 años de la facultad de la Universidad de Vigo y en la historia de 25 años de la facultad antes conocida como INEF, de A Coruña.
- ¿Qué supone este hito?
-Yo creo que significa que ya se ha normalizado la presencia del estudio y la educación física en el ámbito universitario. En este caso, el logro del primer catedrático refleja simplemente la madurez de la disciplina y que va haciéndose tan normal como cualquier otra que acaba teniendo un catedrático.
- ¿Y qué representa para el ámbito universitario del fútbol, donde usted es experto?
-A efectos vinculados a ese deporte, creo que todo apunta a que la relación entre Universidad y el fútbol es una relación de amor: se necesitan mutuamente. El fútbol se está convirtiendo, cada vez más, en un objeto de estudio. Los grandes clubes de fútbol son verdaderas empresas de I+D, porque todas ellas quieren conocer mucho más del juego, de cómo hacer la preparación de los jugadores para mejorar su rendimiento... Por ejemplo, en este sentido, el Fútbol Club Barcelona acaba de inaugurar hace poco más de un año la división "Barcelona Universitas", que es una línea de desarrollo de I+D, conocimiento basado en los aspectos universitarios el fútbol. Y el Real Madrid está muy volcado una Cátedra universitaria de fútbol. Por tanto, es otra prueba más de que la universidad y el conocimiento van de la mano de lo que sucede en el campo. Creo que también es una normalización al entender que la universidad puede aportar mucho.
- ¿Cuándo entrará el Real Club Celta en esa dimensión universitaria?
-Creo que es una cuestión necesaria, porque aquella estampa del el entrenador solo con el preparador físico de hace 25 años se ha transformado. Los grandes clubes tienen decenas de trabajadores analizando hasta el último detalle en cada entrenamiento. Por tanto, yo creo que el Celta está en esa línea, muy acertada, de expansión de la Ciudad Deportiva y de construir una cultura de Club fuerte. Va a necesitar el estudio y el conocimiento para tratar de mejorar. Si alguien mirase varias décadas atrás no entendería la sofisticación tecnológica con la que se entrena hoy, ni la cantidad de datos e información que hay para tomar decisiones. Ahí es en donde lo académico y universitario tiene mucho que aportar. Poco a poco el fútbol ha ido tomando conceptos que ya se veían en la NBA de hace tiempo. Las franquicias americanas tienen a su disposición un verdadero ejército de analistas, estadísticos, estudiosos, que ayudan a mejorar el rendimiento. Por tanto, creo que esta es una de las ideas básicas que tengo claras. Nada más lejos de la realidad que aquello de que en el fútbol está todo inventado.
- Ya cuando presentó el libro "Verdades y mitos sobre el rendimiento en el fútbol" avanzaba esa idea. Era el año 2013.
-Sí (risas). Y entonces, el Fútbol Club Barcelona aún no tenía esa versión de I+D. Pero es lo que está sucediendo en Europa es que los grandes clubes deportivos tienen muchos científicos del deporte encargados de mejorar el rendimiento. Funciona la idea de que son empresas de I+D, donde su gran valor son los jugadores pero al lado tiene que haber mucho conocimiento y aplicación. Es el futuro. La propia Federación Galega de Fútbol ha entendido esto y se ha apoyado recientemente en la Universidad de Vigo para desarrollar una quiniela gallega. Yo he participado en una parte no muy importante de ese proyecto de quiniela gallega, que ha desarrollado el Grupo GEN de la Universidad de Vigo y del que Patricio Sánchez ha sido el verdadero líder.
- ¿Y cómo ha cambiado el juego a consecuencia de tantos avances técnicos?
-Ahora se juega más rápido, hay menos lesiones de las que se cree, el juego es más espectacular, atrae más a los aficionados... Y eso tiene que ver con que se ha mejorado mucho la preparación de los jugadores. Tienen un nivel táctico y de preparación único y una capacidad de recuperarse más rápido, así que pueden jugar más partidos durante la semana. Esa optimización del rendimiento de los jugadores se ha conseguido porque la ciencia ha ayudado a entender como había que entrenar mejor. Es una línea clara. En el Celta se vio con Luis Enrique y algún entrenador más: tomar más datos de los entrenamientos y observar más las posiciones del jugador.
- Además de ser profesor, escribe libros de divulgación.
-En ellos trato de hablar con un lenguaje más cercano y entender cómo cada vez somos más capaces de explicar el juego. Trasladar con un lenguaje más cercano al gran público todos los datos estadísticos a veces difícil de comprender. En definitiva, de lo que se trata en el fútbol es de apoyarse en el conocimiento científico para mejorar el juego.
- La orientación científica del Deporte sigue teniendo tirón social. Este año el Grado se convirtió en la segunda titulación del campus de Vigo en agotar su oferta.
-La cobertura de plazas ha sido inmediata tanto en el Grado de la Universidad de Vigo, como en A Coruña, durante casi en toda su historia. Nunca se ha quedado una plaza sin cubrir, porque existe una demanda real. El graduado en actividad física y deporte está valorado no solo en el ámbito deportivo sino en el de la salud, la condición física, la formación... Y yo creo que en Galicia cada vez se ofrece mejor formación en las Universidades. Por eso, muestro mi agradecimiento a la Universidad de Vigo, a pesar de todas las restricciones presupuestarias del gobierno central, que influyen el número de plazas, y a los tres últimos rectores, Salustiano Mato, Alberto Gago y Domingo Docampo, que han apostado mucho por el deporte y es justo reconocer su esfuerzo.
