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La revolución llega a Telecinco

La cadena ya promociona un "Gran Hermano" lleno de cambios, sin utilizar el ojo de su logotipo

Nuevo eslógan anunciador de Gran Hermano. // Faro

"Todo cambia, todo es nuevo". Telecinco está empeñado en dar un giro radical a su reality show por excelencia, "Gran Hermano". Como ya anunciaron hace meses, "Gran Hermano 18" se estrenará este otoño y se llamará "Gran Hermano: Revolution". La cadena sabe que es hora de hacer cambios en uno de sus buques insignia si no quiere que se repitan los malos datos de su última edición, donde un novato en el formato como Jorge Javier Vázquez tuvo que suplir a Mercedes Mila a última hora. Tras muchas críticas y desencuentros, el programa pasó sin pena ni gloria y Telecinco no quiere que se repita. Además de los primeros anuncios en los que ya avisan de que nada volverá a ser como antes, hemos visto un nuevo logotipo del programa en el que por primera vez desde su creación pierde su característico ojo. Todo un símbolo del programa, y de ser el definitivo, toda una declaración de intenciones. Después de 18 ediciones, los cambios básicos de mecánica y los juegos de secretos ya no sirven para mantener a la audiencia pegada al televisor durante más de tres meses. Lo único que parece no cambiar es su presentador. Jorge Javier Vázquez volverá a conducir el reality después de que las extraordinarias cifras de audiencia de "Supervivientes" le avalen. ¿Conseguirá está vez convencer a los fans del programa de convivencia (y peleas) más famoso del mundo?

Si hablamos de las novedades del verano, hay que destacar el estreno en Televisión Española de "Lolita tiene un plan". Pese a que las comparaciones con el programa de Bertín Osborne son obvias y casi obligatorias, ha sabido reconducir la intimidad de las entrevistas hacia algo que, al menos en pantalla, ha resultado natural y entretenido. En su primera entrega, la actriz y cantante reunió a Lola Herrera, Cayetano Guillen Cuervo y Adriana Ugarte, actrices de tres generaciones distintas, y consiguió que de la mezcla saliese un programa entretenido para las noches de verano. Un verano por cierto, cargado de errores estrepitosos y apuestas desfasadas. El próximo lunes, Lolita se centrará en el mundo del flamenco con Sara Baras, Niña Pastori y José Mercé. A falta de una oferta mejor, puede que consiga hacerse un hueco. Por el momento las audiencias no acompañan demasiado, el estreno del programa fue visto por poco más de un millón de espectadores, un 8,5% del share de esa noche. Habrá que esperar.

Los que pasan por su particular verano de sequía son los colaboradores de "Sálvame". A falta de temas más allá de los palmitos de los famosos en la playa, necesitan el fuego amigo para darle vida al programa. Esta semana le ha tocado a Lidia Lozano. Sus fiestas, famosas por su "baile del chuminero", se han convertido en el centro de las críticas en su vecindario, y ya sabemos lo que vende un vecino traidor en televisión. Denuncias por los ruidos, fotografías desde otras casas y rumores varios sirven para alimentar el culebrón un par de semanas. Tampoco se preocupen, el barco no se hunde, la performance de Paz Padilla enjaulada para no abalanzarse sobre el modelo Marco Ferri, con entrega de bragas incluídas, ha dejado claro que queda show para rato en las tardes de Telecinco.

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