El puertorriqueño Luis Fonsi hizo bailar ayer a más de 6.000 personas en el IFEVI al ritmo de "Despacito", su canción estrella. El single, al que no le queda nada para conseguir las 2.800 millones de visitas en Youtube, cerraba entre gritos de admiración una noche llena de experiencias irrepetibles. Con la máxima de sentir, amar y bailar, el cantante y su equipo no defraudaron a aquellos y aquellas que desde hace meses habían reservado sus entradas.

Con un espectáculo original lleno de efectos especiales y juegos de pirotecnia, Fonsi le devolvió a Vigo el mismo amor que él sintió al recorrer las calles de la ciudad el año pasado, días antes de su actuación en Sanxenxo con la orquesta Panorama. Por lo menos, así lo confesaba en su cuenta oficial de Instagram, donde además decía estar disfrutando de la comida local: "Paseando y conociendo Vigo (España) antes del concierto de esta noche. Hermoso".

Sus 19 años de carrera y sus 10 discos de platino -solo en España- se vieron justificados en la noche de ayer, donde también hubo sitio para sus más que conocidas baladas, como "Yo no me doy por vencido" que, además de sacar toda la fuerza de su voz, sacó la fuerza de las voces de todos sus fans que, desde horas antes, le esperaban ya en los alrededores del Instituto Ferial de Vigo.

Además, el cantante aprovechó el buen clima generado entre público y organización para interpretar temas nuevos de su próximo álbum, que recibieron la aceptación de un público que se mantuvo entregado durante las casi dos horas que duró el show.

Hace unos días, el líder en ventas explicaba en una entrevista a FARO que este nuevo trabajo, precedido por un segundo single, verá la luz en los próximos meses y que seguirá combinando "lo pop y lo urbano", sin dejar de lado su clara vocación sentimental, plasmada en todas esas baladas que llenan el imaginario musical no solo de gran parte del mundo hispanohablante, sino también de muchos países anglosajones.

Prueba de esto son los más de 55 discos de platino que reúne solamente en Estados Unidos y la primera posición que ocupa en las listas de éxitos de más de 50 países, entre ellos los propios Estados Unidos, Alemania, Australia, Bélgica, Canadá, Croacia, Francia, Grecia, Rusia, Suecia o Suiza y, qué duda cabe, toda Latinoamérica.

Sobre las 16.00 horas Luis Fonsi llegaba al aeropuerto de Peinador, desde donde comenzó a prepararse para las pruebas de sonido que tenía programadas para luna hora más tarde ya dentro del recinto y de las que algún fan afortunado y espectante pudo disfrutar.

Ya dentro del camerino y como de costumbre, el puertorriqueño hizo alarde de su modo de vida sano, un estilo en el que ni el alcohol, ni ninguna otra droga tienen cabida. Sin duda unas declaraciones influyentes siendo consciente de su posición de ídolo de masas que ha traspasado fronteras y barreras idiomáticas con tan solo unos minutos de pop latino.

El sentido del humor del cantante también es de sobra conocido y quizá sea uno de los puntos más relevantes a la hora de incrementar su buena prensa, pues siempre ha admirado la creatividad de las parodias e incluso conoce la versión gallega: "En esta vida hay que saber reírse de sí mismo. Yo amo y respeto mi profesión, pero también me la disfruto y si surgen este tipo de situaciones y a mí me parecen graciosas, ¿por qué no? La adaptación gallega la conozco, claro, el ingenio que tienen para hacer estas parodias es increíble", declaraba el intérprete en la entrevista a FARO.