| La finca de San Roque acogió ayer a doscientas personas que participaron en una comida de confraternización organizada por la asociación Apamp (Asociación de Familias de Personas con Parálisis Cerebral) para conmemorar el 40 aniversario de la entidad, creada en 1977 por un pequeño grupo de padres que querían un lugar en el que sus hijos pudiesen desarrollar sus habilidades, compartir su vida con otras personas y dejar atrás el aislamiento que muchos estaban viviendo.