Lorena Romero, Manuel Marticó y Andrea Loureiro son tres alumnas de primer año de Diseño de Interiores de la Escuela de Arte y Superior de Diseño Pablo Picasso que han ganado el primer premio en el certamen D&Ad New Blood Awards 2017 por su trabajo Entangled Party Game —juego encadenado—. El concurso premiaba el mejor diseño de un mecanismo pensado para que los jóvenes no presten tanta atención a los móviles y realicen actividades en grupo.

El juego "está inspirado en la combinación del clásico Twister y la telaraña", explica Lorena Romero. Consiste en un nudo de lana que se lanza a los otros participantes para que éstos vayan diciendo su nombre, y, al mismo tiempo , tiren dos dados, uno con colores y otro que recoge diferentes acciones que tienen que realizar. "Está diseñado para la diversión en parejas, una de ellas se ata la cuerda en el tobillo y otra en la muñeca, y forman un grupo que se coloca en círculo y se dispone a ejecutar las maniobras de los dados", detalla una de las creadoras del proyecto. La pareja que antes deshaga los nudos resulta ganadora.

El proyecto forma parte de una actividad de la clase de Diseño Básico. "La idea inicial era la de diseñar un juego para jóvenes que los sacara de los móviles y las pantallas, para interactuar sin la necesidad de utilizar el teléfono y el ordenador", comenta Romero, que también es arquitecto. Los tres alumnos de la Pablo Picasso empezaron el proceso de creación en noviembre y lo culminaron en febrero para inscribirse en el concurso londinense a finales de marzo.

La competición, que recibió más de 230 propuestas, entregó sus premios el pasado jueves en una gala celebrada en Londres, en la que el trabajo de los alumnos de la escuela coruñesa se desveló como el primer ganador. El premio consiste en la entrega de un D&Ad Yellow Pencil, un trofeo con forma de lápiz amarillo, y en la inclusión del reconocimiento en el anuario de la fundación. Además, la multinacional Hasbro, fabricante del Monopoly y de juguetes como el Señor Patata, producirá y venderá el juego.

"Ha sido maravilloso. Fue un proceso creativo precioso y los comentarios que recibimos del jurado fueron muy positivos", asegura Lorena Romero en nombre de sus compañeros, quienes en todo momento pensaron que tenían "un buen proyecto". Al trabajo final les ayudó Rita Sánchez, que se encargó de realizar parte del vídeo de presentación. Ahora, con el premio en las manos, los alumnos declaran que fue "abrumador, extenuante y fantástico, además de inspirador".

Elena Pardo, profesora de Diseño Básico, supervisó el proyecto y remarca que "se adecuó en todo momento a lo que pedía el concurso", al tiempo que señala que "el cuidado y cariño" que le dedicaron dieron como resultado "un prototipo muy bien realizado".