El director de desarrollo corporativo de Forética -asociación de empresas y profesionales de la responsabilidad social empresarial, entre ellas el 40% de las que cotizan en el Ibex 35-, Jaime Silos, acumula una dilatada experiencia en materia de responsabilidad social. Ayer participó en una sesión denominada "Tendencias y perspectivas en la inversión socialmente responsable" en la que abordaron el nuevo "Proyecto de valor social" de banca privada de CaixaBank .

- ¿La crisis ha repercutido negativamente en la inversión para los proyectos socialmente responsables?

-Afortunadamente no. La crisis ha servido para depurar aquellas compañías que no tenían un compromiso real y cuya postura era un efecto de marketing, lo que hoy llaman "Greenwashing" [del inglés green, verde, y whitewash, blanquear o encubrir, que significa lavado de imagen]. Esas compañías han abandonado la actividad. Mientras, las empresas que tenían un compromiso con la sostenibilidad incluso han avanzado. Hay mejores prácticas hoy de responsabilidad social en España de las que había hace diez años, sin duda alguna.

- ¿Cree que han mejorado?

-Los presupuestos de responsabilidad social se han incrementado mucho, sin lugar a dudas. Si el mundo camina por ese lado, las empresas no se van a quedar al margen.

- La banca es un segmento castigado por esa mala reputación.

-Forética es una consultora, sin ánimo de lucro. CaixaBank lleva trabajando desde hace 10 años en inversión socialmente responsable y va al corazón de su negocio ahora y le da a sus clientes las herramientas para hacerlo. El sector de las cajas de ahorro siempre ha abanderado el discurso de la obra social, pero antes del colapso siempre decíamos que era algo periférico a la actividad bancaria.

-¿También afecta a las instituciones públicas?

-En el caso de la administración, ha entrado en vigor este año una directiva europea de contratación pública que establece y anima a las administraciones a que tengan en cuenta los aspectos sociales en la contratación. Cuando una administración quiere firmar un contrato, lo habitual es preguntar qué garantías tiene usted de que paga sus trabajadores, de que está al corriente de pago con la Seguridad Social y la Hacienda pública? Pues además de esos requisitos 'de toda la vida' ahora se empieza a pedir la responsabilidad corporativa.

- En época de crowfunding , ¿cree que sigue siendo vital el mecenazgo para el arte?

-Las actividades de responsabilidad social se pueden dividir en tres niveles. La primera es integrarlas en el corazón de negocio. Hay otra parte más transversal que supone hacer otra serie de actividades que beneficien a la sociedad en general y de las que la entidad también se beneficie (como prácticas de conciliación de la vida laboral y familiar)... Estamos avanzando ahí, aunque los cambios sociales son largos. La tercera pata es la acción social, por lo que además de la parte filantrópica tenemos la parte estratégica.