Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y policías autonómicas registraron en 2016 un total de 1.272 incidentes por delitos de odio, un 4,2% menos que en 2015, aunque los relacionados con discriminación por sexo y género subieron un 70,8%, debido sobre todo a la reforma del Código Penal de 2015, según explicó ayer el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.

Los incidentes se distribuyen de la siguiente forma: racismo y xenofobia (416 casos), discapacidad (262), ideología (259), orientación o identidad sexual (230), creencias o prácticas religiosas (47), discriminación por razón de sexo o género (41), aporofobia u odio al indigente (10) y antisemitismo (7). El informe refleja que la mayoría de estos delitos ha descendido, como los relacionados con el antisemitismo (-22,2%), la aporofobia (-41,2 %), las creencias religiosas (-32,9%), el racismo y la xenofobia (-17,6%) y con la ideología (-15,9). Sin embargo los relacionados con la discriminación por género se han disparado.