No todos los países reconocen como deporte el fisicoculturismo, más conocido como culturismo. Sí lo hace España, país que empezó a desarrollar esta disciplina allá por los años 70. Es una actividad que se suele realizar en gimnasios y busca obtener musculatura fuerte y definida, logrando la mayor simetría posible entre todas las partes del cuerpo. Abraham González, el actual campeón de absoluto de culturismo en este certamen interterritorial, lo define "como un estilo de vida". Nacido en Redondela y afincado en Vigo, este culturista de 26 años lleva menos de un año dedicándose a esta disciplina, después de pasar por el deporte de la lucha. Así que es un principiante que ha logrado éxitos en muy poco tiempo. "No pensé que podía llegar tan lejos. La verdad es que Rafa (su entrenador), me ayudó mucho y confió en mí", comenta. A diferencia de otros deportes, la competición es una muestra final de lo trabajado durante meses. "Los competidores posan en línea ante unos jueces que valoran las simetrías hombros con brazos, espaldas con piernas, un índice de grasa bajo, una buena definición muscular...En vez de decir, ¡vaya animal!, que dentro de ese cuerpo grande puedas ver una figura bonita", explica Abraham, del que llama la atención su corpulencia en brazos y piernas, "No sé cuánto miden de diámetro, quizá unos 60 centímetros los muslos, y cerca de 50, los antebrazos", matiza. Asegura que la clave para estar tan "cachas" no es tanto machacarse en el gimnasio, como una buena alimentación. "El ejercicio suele ser una hora y media al día, pero éste es un trabajo que comienza desde que te levantas hasta que te acuestas, cuidando mucho la alimentación", comenta. Suelen hacer seis o siete comidas al día, a base de proteínas, carbohidratos, grasas naturales y fruta. Su cuerpo de 1,80 centímetros y más de cien kilos está adornado de tatuajes que en competición oscurece con un tinte especial "para que con las luces del escenario se aprecien mejor las formas musculares", comenta. Ahora ha añadido un nuevo dibujo permanente a su piel, una frase con la que su entrenador le intenta motivar y que ahora luce en sus puños: "Más no es mejor (en el izquierdo). Mejor es mejor" (en el derecho).

Isaac Castiñeira es de O Porriño y quiere ser policía. Además de estudiar oposiciones y trabajar en el negocio familiar, hace tres años comenzó a levantar pesas y a ejercitarse para dedicarse a este deporte."Empecé con mi entrenador pesando unos 55 kilos y hoy en día estoy en unos 98 kilos", comenta Isaac quien recuerda que le entró el gusanillo al acompañar a algunos de sus amigos a las competiciones. El primer año que se presentó a los certámenes consiguió buenos puestos, que mejoró en esta ocasión, convirtiéndose en campeón absoluto de la categoría Men's Physique. "Aún hoy en día, no me lo acabo de creer, de hecho me despierto y tengo que mirar las copas, porque no me lo creo", asegura, al tiempo que se siento orgulloso de dejar bien a Galicia, demostrando además que hay calidad. Isaac seguirá preparándose para, dentro de un año, afrontar nuevos retos a nivel nacional y no descarta estar en alguna gran cita internacional